El Departamento de Estado de los Estados Unidos, publicó un informe en el que devela la grave situación que enfrenta Nicaragua social, política y económicamente, luego de las protestas de 2018, donde se ha expropiado terrenos y fincas, se ha aprobado leyes represivas y reformas fiscales que ahogan al empresariado con altas tasas recaudatorias.

Nicaragua ya no perfila entre los países que más inversión extranjera directa atraen luego de la peor crisis que ha enfrentado el régimen de Daniel Ortega en sus últimos 14 años en el poder. De acuerdo con un amplio informe del Departamento de Estado de los Estados Unidos, los inversionistas deber ser extremadamente cautelosos al momento de pensar en poner su dinero en Nicaragua, pues este país tiene a un régimen autoritario, que ha aprobado leyes represivas en contra de la oposición, empresarios y oenegés que hacen proyectos sociales.

El informe recopila datos como la aprobación de seis leyes represivas que deberían alarmar a los inversionistas, como la Ley de Ciberdelitos o «Ley Mordaza», Ley de Agentes Extranjeros o «Ley Putin», que evita que cualquier persona reciba financiación extranjera para postularse para un cargo, Ley de protección al Consumidor, que podría obligar a que las instituciones financieras tomen decisiones independientes sobre prestar servicios a los clientes financieros, incluso a los sancionados del régimen sandinista.

Antes de 2018, la inversión extranjera directa  alcanzaba cerca de los 1,000 millones de dólares anuales, de acuerdo con reportes del Banco Central de Nicaragua, pero luego de las protestas de ese año, inversionistas decidieron retirarse del país, por la inestabilidad política y social, lo que ocasionó que cayera a 182 millones de dólares en 2020 y para el 2021, el régimen prevé solo 159 millones de dólares.

En esos mismos tres años el informe del Departamento de Estado dice que se han incautado propiedades privadas bajo el argumento de deudas fiscales y han encarcelado a personas sin el debido proceso, entre los que destacan más de 130 presos políticos, 26 de ellos recientemente secuestrados a quienes les imputan delitos de supuesto lavado de dinero y traición a la patria.

Por otro lado, el documento resalta que la pandemia del Covid-19, ha afectado a la economía nacional, provocando la salida de la inversión extranjera directa y el turismo, sumado a la crisis socio-política destaca desde abril de 2018.

“Los intentos del gobierno de ocultar el alcance de la pandemia, incluida la cantidad de casos nuevos y muertes, pueden haber dañado la confianza de los consumidores y los inversores”, revela el Departamento de Estado.

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Inflación y reformas fiscales para recuperar economía, ahogan a los empresarios 

Los datos de este informa también revelan la grave situación económica que enfrenta Nicaragua, que a toda costa el régimen de Daniel Ortega ha querido recuperar y normalizar, omitiendo las violaciones a los derechos humanos que ocasionaron la matanza de más de 325 personas, el exilio de más de 100,000 ciudadanos y un decrecimiento del menos 13 % en tres años de revuelta social.

Según el Fondo Monetario Internacional, la economía de Nicaragua se contrajo 3.8 por ciento en 2018, 5.8 por ciento en 2019 y aproximadamente 3.5 por ciento en 2020. El Banco Mundial espera que la economía crezca 0.9 por ciento en 2021 a medida que se recupera de la pandemia de COVID-19. menos que el 2,5-3,5 por ciento pronosticado por el Banco Central de Nicaragua.

“La inflación aumentó otro 3 por ciento después de subir un 6,1 por ciento en 2019, y el número de nicaragüenses asegurados a través de la seguridad social, una medida de la solidez de la economía formal, cayó un 19 por ciento desde marzo de 2018. Estas condiciones plantean desafíos importantes para hacer negocios en Nicaragua. El crédito desapareció en gran medida a principios de 2019 antes de comenzar a regresar más adelante en el año y en 2020. Las reformas fiscales de 2019 del gobierno continúan dañando los márgenes de ganancia empresarial y aumentando los precios al consumidor. La mayoría de las organizaciones internacionales terminaron su asistencia al gobierno debido a preocupaciones de derechos humanos”, relata el informe.

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Ortega desesperado por buscar inversión extranjera directa

La grave situación económica ha empujado a la dictadura ha buscar inversionistas de Irán, Rusia y China, incentivándolos con exoneraciones o bajas tasas de impuestos al momento de exportar productos requiriendo grandes cantidades de mano de obra no calificada o poco calificada.

“Los inversionistas deben tener cuidado con la Ley de Agentes Extranjeros de 2020, también conocida comúnmente como ‘Ley de Putin’, que impone onerosas cargas de presentación de informes y registros a todas las organizaciones que reciben fondos o instrucciones del exterior, destacan.

Por otro lado, otra de las amenazas a las que se ve expuesto un inversionista, son las expropiaciones, por lo que los poco que quedan, han puesto a nombre de sus representantes legales nicaragüenses sus inversiones.

“Nicaragua permite que los extranjeros sean accionistas de empresas locales, pero el representante de la empresa debe ser ciudadano nicaragüense o extranjero con residencia legal en el país. Muchas empresas satisfacen este requisito recurriendo a su asesor legal local como representante. Los trámites de residencia legal para inversionistas extranjeros pueden demorar hasta dieciocho meses y requieren entrevistas en persona en Managua”, agregan.

Por otro lado, reportan que la grave situación de las finanzas del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) preocupan a los inversionistas, puesto que el régimen aumenta los impuestos y no pone de su parte para sanar el deficit presupuestario.

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Nicaragua tiene potencial para invertir pero debe superar desafíos 

El mismo documento sostiene que Nicaragua es un país con alta posibilidad de inversión, pero antes, sostienen que deben superar los desafíos instituciones y del estado de derecho para restaurar la confianza de los inversores. El reporte destaca los amplios recursos naturales, sector agrícola, sector privado altamente organizado, sofisticado, comprometido con la economía libre, fácil acceso a las rutas marítimas y mucha fuerza laborar joven.

“Los inversores deben ser conscientes de que el gobierno puede tomar medidas adversas contra ellos en cualquier momento con una base o recurso limitado. Sin embargo, no parece que se haya apuntado a inversores extranjeros debido a su nacionalidad”, sostienen.

De acuerdo con datos del Banco Central de Nicaragua, en 2020, Estados Unidos fue el primer destino de los productos nacionales, con mas de 1,402 millones de dólares anuales, seguido de Centroamérica con casi 634 millones de dólares.

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