La jefa del Comando Sur de los Estados Unidos, general Laura Richardson, afirmó en Washington que las dictaduras de Nicaragua, Cuba y Venezuela, «apoyan actividades malignas y desestabilizadoras para la democracia en la región».
Richardson al ser consultada sobre si la relación y cercanía de Rusia con la dictadura sandinista, afectada a Costa Rica, un socio estratégico de los Estados Unidos en la región respondió:
“Si, absolutamente. Se trata de Nicaragua, Venezuela y Cuba, ese nexo solo para esa actividad maligna, para apoyar la actividad maligna en la región y nos gustaría mitigar eso”.
Añadió que “no es bueno para las democracias y nos gustaría deshacernos de eso, porque nuestro deseo es que todos los países de la región fueran democracias prósperas, porque vemos lo que pasa cuando no existe la democracia en esos lugares”.
Las declaraciones las brindó la general Richardson realizó una presentación para discutir los desafíos que enfrenta el Hemisferio Occidental en el Atlantic Council, en Washington DC.
“Veamos lo que pasa en Venezuela, lo que pasa en Nicaragua, lo que pasa en Cuba ahora mismo (protestas), toda esa actividad maligna y desestabilizadora”, sostuvo Richardson.
Se refiere a visita del alto cargo de dictadura rusa
La alto mando del Comando Sur de los Estados Unidos, se refirió sin mencionar su nombre, Nikolai Patrushev, secretario del consejo de seguridad de Rusia, quien a finales de febrero celebró con las dictaduras de Nicaragua, Cuba, Venezuela y Bolivia en Managua, un cónclave para hablar supuestamente sobre tema de seguridad.
«Recibir a líderes de ese país ( Rusia) en la región, solo estimula más actividad maligna y fomenta esa percepción negativa y disminuye la capacidad de las democracias y las instituciones democráticas, y nada nos gustaría más que restablecer la democracia”, dijo Richardson. Cónclave de Rusia y dictaduras: “Declaración de guerra simulada” a EE.UU
“Estados Unidos está preparado ante amenazas”
La General Richardson enfatizó la «proximidad geográfica» de China a América Latina como un factor importante a considerar en su creciente presencia en la región.
Coincidió con las evaluaciones del FBI y la CIA sobre las actividades de espionaje chino en la región y afirmó que Estados Unidos está bien preparado para enfrentar la amenaza que representa la expansión de la influencia china en el hemisferio.
En cuanto al programa espacial chino en Argentina, la General Richardson mencionó que Argentina es un país soberano y que Estados Unidos respeta su derecho a tomar decisiones sobre su propio programa espacial.
Sin embargo, Richardson expresó las preocupaciones de Estados Unidos sobre el programa espacial chino en Argentina, especialmente por su potencial uso para actividades de inteligencia.
No obstante, destacó que la relación entre Estados Unidos y Argentina se ha fortalecido con el nuevo gobierno argentino y que se ha duplicado la cooperación en materia de seguridad.