El expresidente del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), Dante Mossi, encaminó al organismo financiero regional a una posible caída en su calificación crediticia por la exposición al riesgo al otorgar más créditos a Nicaragua, un país con baja calificación crediticia, a criterio de Ottón Solís, ex representante de Costa Rica ante el BCIE.

En junio de 2023, la agencia calificadora de riesgo crediticio Fitch Ratings, calificó a Nicaragua en B- “con perspectiva positiva”, siendo la más baja que existe en el rango de la calificadora.

Solís expresó en una entrevista a Café con Voz, que el banco debe cuidar su calificación crediticia pero a la vez refirió que el BCIE no debe convertirse en un campo de batalla política, por lo que refirió que si se desean aplicar medidas relacionadas a la democracia y el respeto a los derechos humanos, se debe hacer a través de reformas en los estatutos de los organismos financieros, incluyendo al BCIE.

Además, expresó que la nueva administración debe romper con la etapa de Mossi, en la que se brindaban beneficios al directorio del banco a cambio de votos para el presidente.

¿Cómo interpreta esta reacción del BCIE y de la dictadura de Nicaragua?

Un banco como el BCIE depende de la calificación que tenga de las agencias calificadoras para el costo de conseguir recursos. El BCIE no financia los préstamos con las contribuciones de los países, sino que con créditos que obtiene en los mercados de capital del mundo. De acuerdo con la calificación que obtenga, los créditos van a tener mayor o menor interés y a Centroamérica le funciona que sean más baratos.

La calificación es lo que más tiene que cuidar porque es su principal valor agregado. Uno de los índices que evalúan las agencias calificadoras es la exposición relacionada con el riesgo, que es el porcentaje de su cartera de préstamos con cada país. Si el banco tiene alta exposición con un país con baja calificación, entonces la calificación propia del BCIE se va a ver afectada.

No me queda claro si la decisión de la presidenta del BCIE responde a ese riesgo.

La reacción es que el mismo BCIE dice que el nivel de ejecución de Nicaragua es alto, ¿esto no contradice lo que ha dicho la nueva presidente Gisela Sánchez?

Es cierto que Nicaragua tiene un nivel de ejecución de proyectos más elevado que los otros países. Eso no quita de que si Nicaragua tiene una baja calificación el banco se ve afectado. La calidad de ejecución no importa, si hay baja calificación.

¿Se puede decir que, con esta política del BCIE de valorar como están las carteras, se acaba la era de Dante Mossi?

Creo que la era de Mossi se caracterizó por un programa de reelección. Quería congraciarse con directores o con gobiernos para su reelección. Él dañó mucho la calificación y la moral del banco cometiendo muchos errores, elevando los gastos administrativos masivamente para quedar bien y tener el favor de los países con la votación.

Creo que todo eso debe terminarse, porque una de las cosas que urgen en el banco es mayor transparencia, la ética, la lucha contra la corrupción. Muchas de las cosas necesitan tener autoridad moral desde la presidencia ejecutiva y el directorio. Con Dante hubo un matrimonio con el directorio.

Es necesario que ahora existan más elementos técnicos y que se preste a un país, no pensando en el voto, sino por la calidad de los proyectos, la exposición de riesgo y la compatibilidad con la estrategia del banco.

Iván Acosta le sacó en cara a Sánchez que la dictadura votó por ella, ¿qué significa esto?

El Ministro Acosta está acostumbrado a Dante. Él cree que la cosa sigue igual y que puede seguir cobrando por los votos. Me parece que es inercia a ese sistema transaccional.

Pienso que la actual presidenta del banco no va a seguir por esta ruta y estoy de acuerdo con su postura. Iván Acosta va a chocar con un muro muy grande si cree que el manoseo por debajo de la mesa va a seguir.

La dictadura dice que no se debe convertir el banco en un campo de batalla política, ¿Cómo valora estas declaraciones?

No creo que eso lo esté haciendo la presidenta, pero estoy de acuerdo con el ministro de que no debe convertirse en un espacio de batallas políticas.

No quiero un BCIE como uno de esos bancos que controlan los bancos occidentales y Estados Unidos que toman en cuenta elementos ideológicos para prestar. Una de las virtudes del BCIE es que no toma en cuenta eso.

Una de las cosas con las que siempre he peleado contra los condicionamientos ideológicos del Banco Mundial, idénticos a los lineamientos del Departamento de Estado de Estados Unidos que exige firmar tratados o implementar agendas neoliberales. Es una intervención e injerencia terrible.

Hay guerras y chantajes comerciales porque un país no está de acuerdo con lineamientos ideológicos, mientras ese mismo país (Estados Unidos) tiene relación con dictaduras violadoras de derechos humanos como Arabia Saudita. Y es mucho más dictadura Arabia Saudita que Nicaragua.

Entonces, ¿el argumento del ministro pareciera ser una trampa para decir que el banco está utilizando temas ideológicos?

No creo que eso esté haciendo eso la presidenta, pero apoyo la postura del ministro. Si se va a hacer eso, tendríamos que calificar a un montón de países que han violado derechos humanos y nos convertimos en policías del mundo.

El Grupo de Expertos recomendó que los organismos financieros condicionen los créditos a Nicaragua, ¿qué efecto puede tener esta solicitud en relación con Nicaragua?

Meterse en ese terreno es convertirse en policía y juzgar la forma en la que están organizados los países. Analicemos cuántos países que violan derechos humanos tienen poder de voto en el Fondo Monetario Internacional, porque hay países que violan derechos humanos en su territorio y otros que lo hacen en el exterior promoviendo guerras como Estados Unidos y Rusia.

¿Entonces pueden venir a Costa Rica y cuestionar cosas en las que no somos perfectos?

Creo que la acción de vía estos organismos internacionales. La acción es política en Naciones Unidas y es un tema geopolítico. A no ser que se reforme el estatuto del BCIE, el BID y el Banco Mundial y se diga que no se presta cuando hay dictaduras o violaciones a los derechos humanos. Pero el estatuto del BCIE no lo dice, entonces es muy complicado implementar reglas ex oficio.

Me parece que hay mucho doble discurso. Creo en la democracia y para eso hay que reformar el estatuto.

Dante estaba buscando votos y por eso no se fijaba en nada. Hay que saber cuando se vale utilizar la herramienta financiera y por eso estoy de acuerdo en que se debe reformar el estatuto y que El Salvador y Nicaragua valoren si desean continuar en el banco.

¿Cómo valora que Rodrigo Chaves no quiso nombrar al régimen de Nicaragua como dictadura y lo llamó buen vecino?

Una cosa es calificar al régimen y otra es romper relaciones comerciales. Es terrible. Lo que creo que debe hacer Costa Rica es calificar a ese régimen, porque somos vecinos y conocemos la realidad de Nicaragua.

Si el presidente de Costa Rica no califica a la dictadura, ¿qué credibilidad se va a tener cuando se denuncie al régimen?

Si Nicaragua rompe relaciones comerciales por lo que diga Costa Rica, Nicaragua también perdería. Lo que pasa es que hay populismo y los populistas sienten atracción por los regímenes verticales.

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