La dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, pretenden continuar escalando en las agresiones contra la Iglesia Católica, según la abogada Martha Patricia Molina Montenegro, autora del estudio “Nicaragua: ¿una iglesia perseguida?”

A criterio de la abogada e investigadora, va a registrarse una constante de incremento en los ataques a partir de 2023, cuando se abra “una nueva etapa de represión”.

“La constante va a ser incrementar los ataques. Lo que la dictadura va a hacer todo lo posible y va por medio de la criminalización a los sacerdotes por medio de procesos ilegales, cierres de organizaciones y cierre de la mayoría de medios católicos”, señaló.

“Va a existir una tercera etapa en la que vamos a ver un cambio en este tipo de agresiones. No me quiero adelantar, pero como estamos observando la línea ascendente en los ataques a la iglesia católica, podemos esperar lo peor”, añadió.

Molina aseguró en una entrevista a Café con Voz, que en mayo de 2022, nunca se imaginó realizar una segunda entrega del informe de agresiones a la Iglesia Católica.

La primera entrega, realizada en mayo de 2022, se contabilizaron 190 agresiones contra la Iglesia Católica. En esta segunda entrega han sido 396 agresiones; y en lo que va del año, se han registrado 127.

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“Hay una ascendencia y los años con más agresiones son 2018, 2019 y 2022. En los años 2020 y 2021 hubo una disminución en los ataques y nuevamente en 2022 tenemos más agresiones. Después de la segunda entrega incrementó la cifra”, señaló.

Molina aseguró que la metodología está basada en la sistematización incluyendo hechos que solamente han sido comprobados por los medios de comunicación, los comunicados de las diferentes diócesis, diez entrevistas y dos grupos focales.

La autora del estudio, señaló que ha clasificado seis tipologías de ataques a la Iglesia Católica en la segunda entrega.

  • Los templos: Profanaciones y robos en los templos religiosos.
  • Procesos penales: Se recopilaron al menos 14.
  • Mensajes de odio
  • Ataques a los laicos: agresiones de personas que acuden a actividades religiosas.
  • Ataques a religiosos: Es el grupo con mayor ataques.
  • Cierre de organizaciones sin fines de lucro y medios de comunicación.

“También a los laicos se les ha negado el ingreso al país por el simple hecho de tener vínculos con la Iglesia Católica”, añadió Molina.

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¿Por qué atacar a la Iglesia Católica?

A criterio de la abogada, la intención de la dictadura es desaparecer lo que considera “el último bastión de libertad” que queda en Nicaragua.

“El régimen mira como enemigos a los sacerdotes y obispos porque llevan la voz profética. Pero si analizamos cada discurso de los sacerdotes, lo único que hacen es leer la palabra de Dios, pero esta denuncia constantemente las injusticias y arbitrariedades”, dijo Molina.

Conferencia Episcopal debe cambiar de estrategia

A criterio de la investigadora, la Conferencia Episcopal debería cambiar su estrategia frente a la dictadura. Hasta el momento, evita referirse al secuestro de sacerdotes y del Obispo de Matagalpa, Monseñor Rolando Álvarez.

“Desconozco los motivos de la Conferencia Episcopal al no pronunciarse. Nosotros estamos esperando, como fieles católicos, que el mensaje de los obispos sea distinto”, señaló.

“Ellos ya se encuentran en el ojo del huracán y simplemente queremos que se llamen las cosas por su nombre, tal como lo hizo la Conferencia Episcopal en 1986, cuando denunció todas las arbitrariedades”, añadió.

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