El Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Managua, Monseñor Silvio Báez, durante su Homilía de este domingo, respondió a las amenazas de la dictadura sandinista de procesar a líderes religiosas con un combo de reformas que también establecen la confiscación de bienes a voces críticas acusadas por el régimen de “traición a la patria”.
“La mano de Jesús, que sostiene a la Iglesia, es más fuerte que las calumnias y la persecución que se desatan contra ella. La Iglesia puede parecer débil, pero no lo es. No tengamos miedo. Estamos en buenas manos. El rebaño de Jesús es la Iglesia, un rebaño débil, pero sostenido por la mano de Jesús, que nos asegura que a sus ovejas nadie las arrebatará de su mano”, señaló
El pasado 4 de mayo, el Parlamento, al servicio de la dictadura sandinista, aprobó con 77 votos a favor, 11 abstenciones y tres presentes, el informe de trabajo sobre el Análisis de las Normas Jurídicas Aplicables a las personas que cometen delitos de Menoscabo a la Integridad Nacional y crímenes de odio, que busca reformar el Código Penal.
El informe señala que las supuestas víctimas entrevistadas aseguraron que las penas deberían ser más severas y demandaron procesos contra religiosos y directores de organizaciones de derechos humanos.
Báez: «La Iglesia no se doblega»
Por su parte, Báez expresó que la mano de Jesús es la mano fuerte de un pastor fiel y cuidadoso que sostiene a la iglesia y “que lucha contra los lobos que se alzan feroces contra la Iglesia para intimidarla, doblegarla y someterla a sus intereses malignos”.
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«El rebaño de Jesús es la Iglesia, un rebaño débil, pero sostenido por la mano de Jesús, que nos asegura que a sus ovejas nadie las arrebatará de su mano. Más allá de las amenazas de quienes odian a la Iglesia, hay una mano fuerte que la guía y la protege.Como dice san Pablo: ni la vida ni la muerte, ni criatura alguna podrá separarnos del amor de Dios manifestado en Cristo Jesús. Estamos en buenas manos”, añadió Báez.
“No escuchen cualquier voz”
El jerarca en el exilio llamó a los fieles a “no escuchar las voces del mal que engañan y extravían” y que estas condicionen la conciencia de la sociedad.
Báez expresó que cuando se escucha a Jesús, su mensaje no contiene mandatos que cumplir, ni acusaciones. Escuchamos una voz amiga que nos da confianza y nos ilumina.
“En la sociedad hay voces que intimidan y oprimen, voces que se alzan altaneras para imponerse y aplastar libertades. No permitamos que esas voces nos condicionen y nos llenen de temor. Son voces que provienen de corazones oscurecidos y de conciencias atormentadas”, dijo Báez, a la vez que exhortó a “no acostumbrarnos a esas voces”.
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El religioso recordó que la voz de Jesús no obliga, ni acusa, ni humilla. Y que no caminamos por la vida solos y desamparados, sino que él nos ilumina con su palabra.
“Ninguno de nosotros es desconocido para Jesús. Él conoce nuestras tristezas y fracasos, no ignora nuestras aspiraciones y esperanzas. Confiemos en él hasta poder decir con profunda serenidad interior, incluso en los momentos más difíciles de la vida”, dijo Báez.
El religioso expresó que en el rebaño de Jesús cada oveja es única e irrepetible y que cada uno de nosotros tiene un nombre y una historia que él conoce.
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“La masificación de las personas es contraria al amor y la despersonalización solo propicia el dominio despótico”, dijo.
Báez destacó el rol de Jesús como líder y pastor, que busca la libertad y el desarraigo del miedo.
“Un pastor auténtico propicia libertades no provoca miedos. Jesús nos empuja a caminar por senderos nuevos, fuera de rediles que esclavizan y refugios que aíslan. Jesús es pastor de un “rebaño en salida”, que él conduce hacia nuevos horizontes para la fe, para el pensamiento y para la vida”, refirió.