Mientras más periodistas independientes llegan a la Fiscalía sandinista a responder sobre su relación con la Fundación Violeta Barrios de Chamorro, en el caso de criminalización injustificada a la organización defensora de las libertades públicas, operadores de la dictadura revelan que las verdaderas intensiones con todo esto es una maniobra política para frenar la candidatura presidencial de Cristiana Chamorro, exdirectora de la Fundación.
William Grigsby, comentarista y director de la radio La Primerísima, que es parte de los medios de propaganda de la dictadura, admitió hoy que las acusaciones de lavado de dinero y activos que se han fabricado contra Chamorro y de paso contra reporteros independientes, obedece a razones políticas, y todo porque gran parte del financiamiento que recibía la Fundación era de agencias de Estados Unidos.
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«¿Qué si es político el fundamento? Sí, es cierto. ¿Sabes por qué? Porque, ¿de dónde están recibiendo ese dinero? De Estados Unidos, una potencia extranjera que se inmiscuye en los asuntos de Nicaragua. Claro que sí es político por esa razón», dijo Grisgby en su programa radial.
El comentarista de propaganda del régimen amenazó a los periodistas independientes anunciando que aumentará la lista de quienes serán citados a la Fiscalía, por haber realizado programas y reportajes sobre la libertad de prensa y las denuncias de corrupción y violaciones a los derechos humanos del régimen de Daniel Ortega, lo que ha sido criminalizado.
A las 11:00 de la mañana llegaron a las oficinas del Ministerio Público el comentarista Jaime Arellano y el periodista independiente, Ludwing Loáisiga.
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“No tengo nada que esconder, nada que ocultar, es una estrategia para intimidar al periodismo independiente… el periodismo no va a dejar existir, ni dejar de hacer su trabajo”, expresó Arellano al ingresar a la Fiscalía donde fue citado como «testigo» en la investigación contra la Fundación y la precandidata Cristiana Chamorro.