El Grupo de Expertos en Derechos Humanos (Ghren) de la ONU, respondió a las interrogantes que han surgido a raíz de la no incorporación en su segundo informe del Ejército Sandinista en la estructura de mando de la represión de la dictadura sandinista en Nicaragua.
El Ghren presentó su segundo informe el pasado 29 de febrero en Ginebra, Suiza, en el que reiteró que la dictadura sigue perpetrando graves violaciones sistemáticas de los derechos humanos, equivalentes a crímenes de lesa humanidad y graficó como funcionan las estructuras represivas del régimen. Sin embargo, omitió al Ejército Sandinista, a quien si incluyó en informes anteriores y al que organizaciones de derechos humanos vinculan en la comisión de crímenes.
Ante la pregunta de Café con Voz sobre la no inclusión del Ejército en el gráfico, la colombiana Ángela Buitrago, integrante del Ghren, respondió que ambos informes presentados por el grupo deben leerse conjuntamente.
“Si ustedes miran el cuadro que sale en el informe, es una de las partes que se tiene frente a la estructuración, vinculación y articulación de la organización. Eso no quiere decir que no haya otras. El primer informe hacía alusión claramente a la vinculación entre paramilitares y otros grupos del Estado. El segundo informe continúa con una priorización y objetivo frente a los grupos y sobre esos, todas las estructuras que sirvieron al sistema están consideradas por el Ghren”, respondió Buitrago, en una conferencia de prensa en San José, Costa Rica este martes.
Buitrago aseguró que en los dos informes presentados por el Ghren se ha detallado la cadena de mando de la represión y que se han abordado todas las estructuras “por lo que tiene que leerse el informe uno y dos para comprender los niveles de represión”.
No descartan actualizar cadena de mando
La integrante del Grupo de Expertos dijo a Café con Voz, que la investigación sobre la cadena de mandos en la represión de la dictadura no está cerrada puesto que siguen en procesos de investigación.
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“Nada está terminado en esta investigación porque todo está sucediendo en tiempo real. Nosotros lo que tenemos que presentar es la evidencia suficiente para poder determinar una serie de elementos en el informe. Lo que estamos haciendo es mostrar una representación gráfica de una parte de la estructura”, dijo Buitrago, reiterando que sobre el Ejército Sandinista ya se ha investigado y presentado en el informe anterior.
Centenares de confiscados, aunque sin datos precisos
El Grupo de Expertos asegura haber recibido denuncias y testimonios de los 317 desnacionalizados por la dictadura, aunque no tiene una cifra específica sobre la cantidad de nicaragüenses a los que el régimen ha confiscado bienes a través de la privación de nacionalidad o la confiscación a través de la cancelación de personerías jurídicas.
“Estamos tratando de recoger más información para poder llegar a un número más actualizado, pero tenemos más de 370 personas en este caso. Hemos hecho un seguimiento de la confiscación de bienes y cancelación de personerías jurídicas para tener un estimado de las confiscaciones, que son muchísimas. Si estamos hablando de más de 300 personas en apatridia, el número va contando y se acerca a varias decenas de personas”, dijo Buitrago.
También expresó que entre los factores que imposibilitan obtener una cantidad concreta sobre las confiscaciones están el temor de las víctimas que están dentro de Nicaragua y la negativa de la dictadura a permitirles ingreso al territorio para investigar.
Además, expresó que en la actualización oral de septiembre de 2024 y en el próximo informe, el Ghren profundizará sobre violaciones a derechos humanos en territorios indígenas y corrupción.
¿Cómo demandar a la dictadura?
Adicionalmente, Buitrago recomendó a las víctimas de la dictadura de Nicaragua, acudir a organizaciones de derechos humanos que conocen los mecanismos para interponer demandas contra el estado nicaragüense por la comisión de estos crímenes.
“A nivel regional, para responsabilidad estatal, hay organizaciones que realizan las demandas ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte-IDH), aglutinan a las víctimas y terminan en un caso contencioso ante la Corte, que tiene competencias para sancionar al Estado”, afirmó.
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“La Corte Internacional de la Haya tiene a los países que pueden ejercer acciones contra el Estado en representación de otras personas que no sean de su país. La forma de llegar a cada corte tiene métodos pero hay organizaciones que saben como acceder a estos sistemas”, añadió.
El segundo informe presentado el 29 de febrero, señala que la persecución por parte del régimen de personas opositoras reales o percibidas como tales se ha vuelto más sutil. Se perpetran violaciones, abusos y crímenes no sólo para desmantelar los esfuerzos activos de la oposición, sino también para eliminar todas las voces críticas y disuadir, a largo plazo, cualquier nueva organización e iniciativa de movilización social.
En la actualidad, al estar cada vez más cerca del objetivo de la destrucción total de las voces críticas en Nicaragua, los patrones de violaciones al derecho a la vida, la seguridad y la integridad de la persona son actualmente menos prevalentes. Durante 2023 ha habido un aumento exponencial de patrones de violaciones centrados en incapacitar cualquier tipo de oposición a largo plazo.