Una parte de los religiosos de la Compañía de Jesús han salido de Nicaragua para evitar represalias ante la persecución de la dictadura contra la Iglesia Católica y la confiscación de la Universidad Centroamericana (UCA)
José María Tojeira, designado como portavoz en la crisis que enfrentan en Nicaragua señaló que una parte de los religiosos han salido, pero que los de mayor edad han optado por quedarse en el país.
“Es increíble que hay religiosos que no quieren salir y prefieren estar sus últimos días y sus últimos años acompañando a los nicaragüenses”, dijo Tojeira.
El sacerdote añadió que los religiosos adultos mayores fueron expulsados de su vivienda tras la confiscación a raíz del cierre de la personería jurídica de la Compañía de Jesús.
También señaló que el rector de la UCA, el padre Rolando Alvarado, abandonó el país a través de puntos ciegos, por temor a ser encarcelado al amparo de las acusaciones de terrorismo que la Justicia sandinista formuló para apoderarse de la universidad.
Liquidan a personal de escuelas
La Compañía de Jesús aun tiene dos entidades educativas en Nicaragua: El Colegio Centroamérica y el Colegio Loyola. Tojeira señaló que estas entidades han liquidado a maestros ante la posibilidad de ser confiscados.
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“Previendo todas las posibilidades a todos los profesores de los dos colegios se les ha indemnizado y se ha gastado una enorme cantidad de dinero en indemnizarles, porque si llegaran a cerrar los colegios al menos tienen ese fondo de la indemnización”, informó Tojeira en una comparecencia virtual en el canal Somos Jesuitas.
Dictadura con mayor control
En una inferencia sobre la situación de Nicaragua, Tojeira aseguró que la dictadura se radicaliza, pero que esto a la vez, la lleva a su ruptura.
“Esto ha ido en un crecimiento sistemático que ha llegado a un control casi absoluto en la vida de Nicaragua y ha infundido un temor muy fuerte. Hay gente afuera que no quiere hablar de la situación por temor a que su familia sea perseguida y hostigada. Este control no lo había visto”, dijo.