Cada vez más venezolanos duermen en las calles de Honduras, Guatemala y Nicaragua, piden comida y se preocupan por su destino. Algunos han recurrido a las autoridades locales para solicitar un salvoconducto de regreso a casa. Otros han prometido perseverar y llegar hasta Estados Unidos.

Un cambio abrupto en la política de inmigración del gobierno de Joe Biden, en este mes ha dejado, prácticamente de la noche a la mañana, a decenas de miles de migrantes venezolanos, que recorren desde el sur de Centroamérica hasta la frontera entre México y EE. UU.—varados en un limbo burocrático.

Vladimir Kislinger, periodista venezolano en el exilio, señaló que la medida de Estados Unidos y el anuncio de un Parole Humanitario, son inéditas para los latinoamericanos.

“Es una medida inédita para los venezolanos y para todos los latinoamericanos. En lo que va del año, han pasado 156 mil venezolanos. De los 24 mil, no creo que ni siquiera la mitad logran entrar. A muchas personas se les está aprobando el Parole humanitario y la mayoría no pueden usarlo”, dijo Kislinger en referencia al Parole humanitario.

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En una entrevista a Café con Voz, señaló que el anuncio de Biden generó mucha preocupación entre los familiares de venezolanos.

“Las familias están muy preocupadas, porque muchos querían verse pronto con sus seres queridos. Estamos hablando de una comunidad que no tenía recursos, que vendieron todo lo que tenían y llegaron hasta México sin un centavo”, señaló

Refirió que esta crisis migratoria, posiblemente la mayor en la última década, propicia escenarios de delincuencia y crimenes internacionales.

“Al no tener dinero, comienzas a hablar de tráfico de drogas, secuestros, trata de blancas, secuestros, tráfico de órganos, entre otras cosas. Si no hay una solución hemisférica, va a empeorar la situación para Estados Unidos y para los países alrededor”, señaló.

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Los Coyotes, comparten culpa en la crisis migratoria

La mayoría de los venezolanos son engañados por coyotes, quienes les prometen llegada segura hasta Estados Unidos, aunque al final, terminen abandonando a los migrantes.

“Los Coyotes hacen negocio a costa de la seguridad y la vida de los emigrantes. Los venezolanos eran engañados por los coyotes, que los hacían pensar que los iban a recibir con bombos y platillos”, señaló.

También se refirió a la dictadura venezolana, que propicia la migración para obtener mayores recursos económicos con la venta de pasaportes.

“La dictadura de Venezuela habla de la migración, pero trivializan las cifras. Ellos han hecho pan y circo de la realidad, mientras las familias están divididas y algunos están siendo secuestrados y desaparecidos”

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