Masaya, Nicaragua. 02/05/2017. Entre Naranjales muchas personas cruzan la frontera que comparten Costa Rica y Nicaragua en el sector de Las Tablillas, Los Chiles, se trata de una ruta que conduce a un punto ciego de la frontera que tienen ambos países y que desde hace varios años le sirve a los indocumentados que pasan burlando con facilidad a las autoridades. Jader Flores/ LA PRENSA.

A tres meses de que se consume el sainete electoral que Daniel Ortega y Rosario Murillo, han montado para mantenerse en el poder, la cantidad de nicaragüenses que emigra hacia Estados Unidos se sigue disparando, de acuerdo a información oficial de los servicios de guardas fronteras de este país.

En el mes de julio, según datos del Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos, fueron detenidos 13,391 nicaragüenses intentando cruzar la frontera de manera irregular. La cifra prácticamente duplicó la del mes anterior cuando, de acuerdo a la misma fuente, se reportaron 7,441 connacionales procurando pasar la frontera en busca de un mejor futuro.

Cifras impresionantes

En lo que va del año un total de 31,713 fueron retenidos en su intento de ingresar por diferentes puntos fronterizos a Estados Unidos. De ese número global, 574 fueron en enero, 748 en febrero, 1,990 en marzo, 3,120 en abril, 4,451 en mayo y 7,441 en junio.

Los números indican que del total de nicaragüenses reportados 18,934 son adultos, 12,781 en una unidad familiar y 1,468 menores de edad no acompañados y solo un menor acompañado.

La crisis sociopolítica que atraviesa Nicaragua, producto de la represión de la dictadura de Ortega y Murillo, más la difícil situación económica que vive el país con alto desempleo y carestía de la vida, han empujado a miles de nicaragüenses a salir del país hacia Costa Rica y Estados Unidos.

En el caso de los que deciden que su destino es Estados Unidos, pasan una peligrosa odisea desde Honduras hasta la parte norte de México, arriesgando la vida y la libertad, pues algunos caen en manos de carteles de la droga que los secuestran y piden miles de dólares por su liberación. Los que logran llegar de la mano de «coyotes» a la frontera de Estados Unidos y pasan por puntos ciegos, deciden entregarse a las autoridades migratorias para solicitar asilo político, mientras que otros son capturados por las patrullas fronterizas.

De acuerdo con la organización de ayuda al migrante Nicaraguan American Human Rigth Alliance (Nahra), las solicitudes de asilo político en la frontera sur de los Estados Unidos de parte de nicaragüenses, había aumentado en un 660% en  los meses de febrero a junio del 2021, comparación con otros años y meses, donde se han registrado aumentos menores que este.

Para Astrid Montalegre, presidente de Nahra, es difícil que las autoridades estadounidenses resuelvan favorablemente para que una persona entre al territorio estadounidense y así pueda solicitar asilo político, pues los casos son estudiados y si carecen de pruebas o fundamentos, son retornados a sus países de origen.

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