Ximena Palacios Molina de 19 años de edad fue torturada por 24 horas por parte de paramilitares y policías sandinistas, quienes la secuestraron y le preguntaban por el paradero de su mamá, una reconocida opositora del departamento de Carazo que se mantiene en el exilio desde 2018.

La adolescente de 19 años, Ximena Palacios Molina, estudiante de la carrera de medicina en la Universidad Central de Nicaragua (UCEN) del departamento de Carazo, tuvo que huir del país al igual que su madre y familia lo hicieron en  agosto de 2018, cuando el régimen sandinista inició el hostigamiento en contra de ellos, solo por haber participado en las protestas.

Ximena había decidido quedarse en Nicaragua para culminar sus estudios, pero el asedio aumentó a tal punto de ser secuestrada por paramilitares quienes la mantuvieron por dos días bajo golpes, gritos y ofensas, relató la mamá de la joven, Idania Molina.

“En 2018 salí del país, vivimos allanamientos, logré entrar a Estados Unidos, mi hijo en muletas, en silla de rueda por un disparo, aquí ya tuvo sus operaciones, su pie fue rescatado… no basta tanto eso, en este mes, mi hija saliendo de la universidad, estaba estudiando medicina y cirugía, a las dos cuadras una camioneta la abordó, la abordaron dos hombres quienes le pusieron una capucha negra en la cabeza, la montaron, en la camioneta había una mujer y dos hombres, la mujer fue la que le pegó el primer golpe y me dijo «mamita, yo tuve que abrir la boca para poder agarrar aire porque me sacó el aire la mujer», a ella me la golpearon, tengo fotos y evidencias de todas las torturas que le hicieron”, dijo entre llanto la exiliada en los EEUU.

Al momento del secuestro, los paramilitares le preguntaban a la joven Ximena Palacios por los que lideraban las barricadas (tranques) en el municipio de Jinotepe, departamento de Carazo, mismos que fuero derribados a sangre y fuego el 8 de julio de 2018 por personas vestidas de civil y la sancionada policía sandinista. De acuerdo con recuentos de organismos de derecho humanos, ese día fueron asesinados más de 15 jóvenes.

Paramilitares le golpearon y le preguntaban por su madre.

De acuerdo con Idania Molina, los paramilitares forzaron a su hija para decirles dónde estaba, con la amenaza de que la iban a asesinar.

“No sé que es lo que ellos quieren de mí, que a mí me hagan lo que ellos quieran, pero con mis hijos no, este gobierno es un asesino que me han destruido por completo”, expresó Molina.

La madre de la joven que sufrió tortura pidió a los organismos de ayuda al migrante que apoyen a su hija, que se encuentra retenida en el Estado de Arizona, donde se entregó a la policía para iniciar su proceso de solicitud de asilo político.

Esta joven se une a los cientos de nicaragüenses que están retenidos en los puestos migratorios estadounidenses, quienes han emprendido un largo viaje huyendo de la represión, hostigamiento y amenazas de muerte de parte de paramilitares y efectivos de la sancionada policía sandinista.

“Mi hija está recibiendo atención psicológica porque la dejaron traumada, acuso y denuncio al gobierno de Daniel Ortega, por todo el acoso y persecución que ha sufrido mi familia, mis hijos y yo, le pido al gobierno de los Estados Unidos, Unión Europea y la OEA que tomen carta en el asunto y apoyen a mi hija”, relató Molita.

La familia de esta joven, espera la resolución de solicitud de asilo político en Estados Unidos 

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