No hay respiro, paz ni seguridad alguna para los periodistas en Nicaragua, bajo la dictadura sandinista que encabeza la familia Ortega-Murillo. Este 9 de julio la periodista Nohelia González fue secuestrada y se desconoce su paradero.
González fue Jefa de Información en el diario La Prensa por 28 años y luego trabajó casi dos años en el Canal Católico de Nicaragua.
Antes del cierre de ese medio de manera definitiva, González comenzó a laborar en una organización no gubernamental y en actividades comerciales fuera de los medios.
Según 100% Noticias, la policía de la familia Ortega-Murillo llegó a la casa de González en a las 6 de la mañana.
La sacaron a fuerza y la llevaron, se suponía al aeropuerto internacional de Managua para desterrarla hacia Panamá, pero luego se conoció que a ese país no llegó.
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Nohelia González estaba fuera de los medios
González estaba en la lista de 100 periodistas nicaragüenses que en 2021 fueron citados ante la Fiscalía del régimen, en el caso inventado contra la extinta Fundación Violeta Barrios de Chamorro.
Ella fue citada el 24 de agosto de 2021 en el Ministerio Público, luego de haber participado en un programa de capacitaciones de la Fundación Chamorro.
La organización Periodistas y Comunicadores Independientes de Nicaragua (PCIN) ha reportado en las últimas semanas una nueva ola de asedio, amenaza y persecución contra periodistas.
En esta nueva y tenebrosa jornada de represión y persecución, los esbirros del régimen están atacando directamente a periodistas en retiro, inactivos y hasta jubilados.
El régimen de Ortega-Murillo ha mantenido una política de destierro, expulsión y despojo de la nacionalidad contra periodistas nicaragüenses, desde abril de 2018.