Las negociaciones entre el gobierno de Nicolás Maduro y la Plataforma Unitaria en Venezuela han quedado “en cuidados intensivos” tras una decisión judicial que anuló la primaria presidencial opositora, si bien sus acuerdos y el diálogo aún están a tiempo de salvarse, valoran analistas consultados por la Voz de América.
La Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, que suele favorecer al oficialismo en sus sentencias, según organizaciones y expertos independientes, suspendió este lunes “todos los efectos de las distintas fases” de la primaria autogestionada realizada por los partidos opositores el 22 de octubre en más de 3.000 centros de votación dentro y fuera del país.
Según la Comisión Nacional de Primaria, la candidata María Corina Machado ganó ese proceso con 92 % de los votos de poco más de 2,4 millones de electores.
Voceros del oficialismo, entre ellos Maduro y el fiscal general y ex gobernador del chavismo Tarek William Saab, acusaron inmediata, sistemática y públicamente a sus organizadores de cometer irregularidades diversas en la votación.
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Las denuncias incluyen la presunta inflación de las cifras de participación.
La sentencia de la Sala Electoral del máximo órgano del poder judicial se comunicó 2 semanas después de que las delegaciones del oficialismo y la oposición que negocian desde hace 2 años bajo la facilitación del Reino de Noruega firmaran en Barbados un par de acuerdos políticos y económicos.
El primer punto del pacto sobre derechos políticos y garantías electorales firmado en Barbados precisa que ambos bloques “reconocen y respetan el derecho de cada actor político de seleccionar su candidato para las elecciones presidenciales de manera libre y conforme a sus mecanismos internos, atendiendo a lo establecido en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y la ley”.
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Expertos consideran que la sentencia contra la primaria no solo es una posible violación del acuerdo de Barbados, sino una amenaza a la negociación entera.
“Con esta acción, el proceso de negociación no está muerto, pero está en cuidados intensivos”, comenta a la Voz de América el analista sénior de The Atlantic Council y especialista en asuntos políticos de América Latina, Geoff Ramsey.