La dictadura sandinista decidió iniciar un juicio en contra del empresario Piero Coen Ubilla, cuyas propiedades han sido invadidas por guardias al servicio del régimen con el objetivo de robarlas, como ha sido la tónica en los casos de bienes de organismos no gubernamentales, universidades, medios de comunicación y desterrados políticos.
Según el Sistema Nicarao del Poder Judicial, la dictadura emprendió una acusación contra Coen Ubilla el pasado 27 de marzo de 2023 en el que asegura que la víctima u ofendido es el Estado de Nicaragua y la Sociedad Nicaragüense, sin especificar el tipo de delito.
Hasta el momento se desconoce si Coen está en el país y quien se encuentra llevando a cabo el proceso es la jueza sandinista Karen Vanessa Chavarría Morales.
Según una publicación del Diario La Prensa, que asegura haber tenido comunicación con fuentes cercanas a la familia, en horas de la mañana de este viernes agentes de la Policía Sandinista allanaron su vivienda en Las Colinas y en el Complejo viejo Santo Domingo.
“La casa es propiedad de Coen Ubilla y de su esposa, que es ciudadana estadounidense. En el condominio Viejo Santo Domingo funcionan las oficinas del empresario”, señala el Diario La Prensa.
Coen dirige el grupo Coen, con más de sesenta años de operaciones y vinculado a la empresa Western Union, con operaciones en Centroamérica y México y una fábrica de papel reciclado en El Salvador.
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Las acciones de la dictadura ocurren semanas después de una amenaza del agitador político de la dictadura William Grigsby Vado, director de Radio La Primerísima, que señaló que la dictadura tiene en la mira a los grandes empresarios.
No olvidan a Coen en 2018
El 22 de abril del 2018 el empresario se subió a la parte superior de su vehículo alzando la bandera de Nicaragua para celebrar con los manifestantes la revocatoria del decreto de reformas al INSS que anunció Daniel Ortega esa noche. Coen estaba con su familia en la rotonda Jean Paul Genie, carretera a Masaya, lugar donde se concentró una multitud para manifestarse quienes gritaban «pueblo únete, pueblo únete, fuera Daniel, fuera Daniel».
«Yo creo que los estudiantes y la gente estaban esperando un mensaje un poquito más contundente, está bueno que sigamos haciendo avances y está bueno que continuemos dirigiéndonos al pueblo, pero yo creo que los jóvenes quieren oír otra cosa, quieren oír que ellos no son delincuentes, quieren oír que el pueblo está detrás de ellos, y lo único que no queremos es violencia, eso es todo» dijo en aquel momento a 100%Noticias.