Aunque la postura del mandatario Guatemalteco inclina la balanza a no aceptar a Rusia y China en el Sistema de Integración Centroamericana (SICA), el dictador Daniel Ortega, podría presionar aun más para que sus patrocinadores logren ingresar como observadores.
Alejandro Giammattei, presidente de Guatemala, ha señalado que China no debería entrar al SICA, una propuesta que Ortega lanzó al aire en una transmisión en cadena nacional de radio y televisión.
A criterio del catedrático y analista de asuntos internacionales, Carlos Murillo, el dictador continuará presionando a sus países vecinos como “peón” de Rusia y China con el objetivo de que las dos potencias asiáticas tengan mayor influencia en la región para enfrentar política, militar y económicamente a Estados Unidos.
La realidad es que Ortega no ha podido incluir a Rusia y China al Sica como observadores, ¿cómo ve el panorama hasta el momento?
Las organizaciones intergubernamentales atraviesan una fase de debilidad institucional y en el caso del SICA, históricamente la integración centroamericana ha tenido altibajos. Este es un momento en el que las cumbres presidenciales de cada seis meses ya no se realizan y prácticamente no hay comunicación entre mandatarios y cancilleres.
Este momento crítico ha sido agravado por la forma en que se designó al secretario general del SICA, que fue impuesto por Managua y esto debilitó la gestión de la Secretaría General, porque carece de legitimidad por la forma en que llegó.
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Para Daniel Ortega, resulta clave la alianza con Rusia y no podemos olvidar que en el SICA las decisiones se toman por consenso. Si en 2016 ya se había abordado la integración de Rusia, ahora debe ser confirmado por consenso. Pero de momento, nadie ha dicho a viva voz que no quieren a Rusia dentro del SICA. A veces siento que hay temor a cuestionar las propuestas de Daniel Ortega.
Si no hay consenso, no se puede sustituir a Taiwán con China por más que quiera Honduras y Nicaragua.
A Rusia y China le interesan tener un pie en Centroamérica, pero no porque les interese Nicaragua, sino porque ellos desean posicionarse en la región para confrontar a Estados Unidos.
¿Puede Ortega ordenarle al secretario del Sica, su empleado Werner Vargas, incorporar a Rusia argumentando que ya existía un acuerdo previo?
Se lo puede ordenar, pero la decisión de incorporar a Rusia primero pasa por la reunión de cancilleres, donde se tienen que conocer las propuestas de formalizar un proceso de casi siete años para integrar a Rusia. Una vez que los cancilleres dicen que sí, se eleva a la cumbre de presidentes. No es una decisión que le corresponde al secretario general, sino que quienes tienen la última palabra son los presidentes.
No veo en este momento, por más que Ortega ordena a su representante personal en el SICA, que el trámite se complete.
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¿Qué consecuencias puede haber si Ortega mantiene fuerzas para incluir a Rusia y China?
Puede haber otro impase similar al del Secretario General porque podría paralizar muchos procesos administrativos. Habrá que ver qué va a pasar con las propuestas de la Secretaría General para la ejecución de proyectos del Sica para el próximo año, porque prácticamente está trabado.
Podría desprestigiarse el rol de la Secretaría General y del SICA por el tema de coordinación.
Ortega puede presionar a Costa Rica, ¿está listo Rodrigo Chaves para enfrentar a Ortega?
Todos los países centroamericanos tienen una posición geopolítica clave y Nicaragua lo es más, lo que le da cierto poder de influencia a Ortega porque tiene la llave del paso fronterizo de sur a norte. Por eso, cada vez que Ortega dice que va a cerrar la pasada, se detiene el flujo de bienes en la región.
Uno nunca sabe cuál va a ser la respuesta de Rodrigo Chaves porque no hay política exterior, solo reacciones ante una serie de situaciones coyunturales.
Iran tiene acercamientos también con Nicaragua con el apoyo militar, ¿esto que fue descubierto en la filtración del Pentágono, no ha tenido tanta trascendencia y se ve de forma díscola?
Los informes de inteligencia tienen datos reales y otros que no. En inteligencia se debe leer entre reglones para saber qué información es cierta y cuál no.
Claro que hay una amenaza a la seguridad de Estados Unidos. Tanto Rusia y China tienen un proyecto hegemónico a nivel global y por eso es fundamental para ellos estar en Centroamérica y desde acá atacar a Estados Unidos en una eventual guerra. Si Rusia da un paso, China da otro paso porque no va a querer darle el espacio libre a Rusia.
Lo interesante es lo que hace Irán entre dos potencias. Donde Irán llega, está Hezbolá. Entonces, esto lo que está haciendo es convertir en América Latina en escenario de una eventual tercera guerra mundial.