A una semana de las elecciones en Estados Unidos, las encuestas muestran una ventaja muy ajustada de Kamala Harris sobre Donald Trump a nivel nacional.
Sin embargo, en los estados clave la competencia sigue siendo reñida. Existe la posibilidad de que las encuestas nacionales y estatales estén mostrando tendencias diferentes.
Además, se destaca que los sondeos para el Senado en Texas y Nebraska también muestran competencia ajustada, lo que podría tener un impacto en el control del Senado.
La ventaja de la vicepresidenta Kamala Harris sobre el ex mandatario Donald Trump en las encuestas nacionales empieza a ser muy escasa.
Las elecciones más reñidas de EEUU
En general, la candidata demócrata lidera por menos de 1 punto porcentual, según el promedio de encuestas de The New York Times. Es su menor ventaja desde mediados de agosto.
Y muestra, en realidad, un empate técnico por los llamadios márgenes de error que pueden ir a uno u otro bando.
Aun así, los sondeos de la semana pasada ofrecieron un resquicio de esperanza para ella: a nivel estatal no parecían inclinarse hacia Trump, aunque sí lo hicieran las encuestas nacionales.
Los estados más disputados siguen estando extraordinariamente reñidos, y ningún candidato tiene una ventaja significativa en los siete estados con más probabilidades de decidir la presidencia.
En cierto sentido, no es sorprendente. Lo interesante es que Harris sigue siendo competitiva en los campos de batalla a pesar de que su ventaja nacional se redujo desde agosto.
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Trump no lo tiene fácil
Normalmente, un empate en la votación nacional no sería un buen augurio para los demócratas.
Durante sus dos primeras contiendas, Trump lo hizo mucho mejor en los estados disputados que a nivel nacional, lo que le permitió derrotar a Hillary Clinton sin ganar el voto popular nacional y casi hacer lo mismo contra Joe Biden.
En 2020, perdió el voto popular nacional por 4,5 puntos, pero perdió los siete principales estados disputados por una media de solo 0,9 puntos, una diferencia de más de 3 puntos.
En los promedios de las encuestas actuales, la diferencia entre las encuestas nacionales y el promedio de los estados disputados cayó por debajo de 1 punto.
La posibilidad de que la ventaja de Trump en el Colegio Electoral se desvanezca un poco este noviembre no es necesariamente una sorpresa.
En los últimos años, hubo muchos indicios de esto, desde los resultados de mitad de mandato hasta los patrones demográficos en las encuestas nacionales.
Sin embargo, estas teorías no explican necesariamente por qué las encuestas parecen tender en direcciones diferentes en las últimas semanas.
Dos historias de encuestas
La semana pasada se publicaron nueve encuestas nacionales de «encuestadores selectos» (lo que significa que cumplen ciertos criterios de fiabilidad), y no podrían haber mostrado una carrera más reñida.
Tres mostraban un empate, incluida la encuesta del Times/Siena College, y tres mostraban a Harris en cabeza. La mejor, una encuesta de ABC News/Ipsos, la situaba 4 puntos por encima.
Por otro lado, tres de las encuestas daban ventaja a Trump; la mejor, la del Wall Street Journal, le otorgaba una ventaja de 3 puntos.
Si se toma la media simple de esas nueve encuestas, se encuentra a Harris por delante por menos de un punto. Las matemáticas que hay detrás de la media de las encuestas del Times son más sofisticadas, pero dan la misma respuesta.
En casi todos los casos, las encuestas nacionales de la semana pasada mostraron que Trump ganaba en comparación con la última encuesta de la misma empresa.