Voz de América. A medida que las elecciones presidenciales de Estados Unidos entran en su fase final, cada vez más votantes expresan apoyo a su candidato favorito con prendas y mercancías electorales. Y China está presente.
Lo que quizás no sepan es que la gorra de Trump con la leyenda “Make America Great Again” (Hagamos grande a EEUU otra vez) o la camiseta “Childless Cat Lady for Harris” (Mujeres sin hijos y con gatos por Harris) que llevan puestas posiblemente se fabricaron en China.
Con la ayuda de las plataformas de comercio electrónico, los comerciantes chinos están inundando el mercado de productos electorales estadounidenses con manufactura barata. La evidencia anecdótica sugiere que los fabricantes estadounidenses de estos productos están teniendo dificultades para competir.
“Creo que la cantidad de cosas en Amazon y Etsy que llegan desde China y otros países en barcos de carga y se descargan en las costas estadounidenses está afectando drásticamente la capacidad de los fabricantes estadounidenses, como yo, de competir y hacer crecer nuestro propio negocio. Creo que es dramático”, dijo Ben Waxman, fundador y copropietario de American Roots, una empresa estadounidense de ropa.
Diferencia de precios abismales
Waxman no compartió las cifras de producción o ganancias con el Servicio Mandarín de la VOA por cuestiones de privacidad, pero dijo que sus camisetas de campaña hechas en Estados Unidos, por ejemplo, se venden por unos 15 dólares cada una, mientras que las del minorista chino en línea Temu se comercian por tan solo 3 dólares.
«Es más caro cuando pagas salarios más altos, salarios dignos y respetas las normas ambientales», dijo Waxman, refiriéndose a las críticas de larga data a las prácticas de fabricación de China.
Su empresa sindicalizada ha estado produciendo artículos de campaña para candidatos presidenciales desde 2016, principalmente camisetas y sudaderas, con todas las materias primas y la producción provenientes de Estados Unidos.
Inundando el mercado
El Servicio Mandarín de la VOA no pudo encontrar cifras totales de ventas de artículos electorales fabricados en Estados Unidos, en comparación con los hecho en China.
Sin embargo, la enorme cantidad de productos electorales fabricados en la nación asiática que están actualmente a la venta en plataformas de comercio electrónico, incluidas Amazon y eBay, muestra que están inundando el mercado.
Solo en Temu, se han vendido decenas de miles de artículos con temas electorales a una fracción del precio de las versiones oficiales de las campañas.
Entre ellos, una gorra con la leyenda «Make America Great Again» cuesta menos de $4 dólares, mientras que el sitio web oficial de la tienda de la campaña del expresidente y candidato republicano Trump, – que presume de «Todos los productos fabricados en Estados Unidos»-, los vende por 10 veces más. El precio de cada artículo es de 40 dólares cada uno.
Asimismo, los sombreros “Kamala Harris 2024” de Temu se pueden vender por menos de 3 dólares cada uno, mientras que el sitio web oficial de la tienda de la campaña de la vicepresidenta demócrata Kamala Harris vende sombreros “Kamala” por 47 dólares cada uno.
La campaña de Harris también prometió vender solo productos fabricados en los EEUU en sus sitios web oficiales.
La VOA solicitó comentarios a ambas campañas, pero no recibió una respuesta al momento de la publicación.
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China y la laguna de los minimis
El marcado contraste en los precios resalta los desafíos que enfrenta Estados Unidos para reducir su dependencia de los productos chinos y cerrar una laguna comercial, conocida como la laguna de minimis, que permite a las empresas chinas enviar productos por un valor inferior a 800 dólares a los EEUU sin pagar derechos de importación.
Kim Glas, presidenta y directora ejecutiva del Consejo Nacional de Organizaciones Textiles (NCTO en inglés), una organización alineada con los sindicatos, dijo que el abuso de la laguna de minimis es rampante y agregó que su grupo «perdió 21 operaciones de fabricación en los últimos 18 meses».
Glas dijo que algunos de los fabricantes miembros de NCTO encontraron que las ventas de productos de campaña son más lentas este año que en cualquier ciclo electoral anterior en los EEUU.
VOA Mandarín se comunicó con Amazon y eBay para obtener comentarios sobre el volumen de productos de campaña presidencial importados de China en sus sitios web y sus regulaciones a los vendedores chinos, pero no recibió una respuesta al momento de la publicación.
Críticos con Chino, pero no con sus precios
Temu no hizo comentarios sobre las ventas de productos electorales en los EEUU, pero el portavoz de la compañía respondió en un correo electrónico a VOA Mandarín:
«El crecimiento de Temu no depende de la política de minimis. Los principales impulsores detrás de nuestra rápida expansión y aceptación en el mercado son las eficiencias de la cadena de suministro y las competencias operativas que hemos cultivado a lo largo de los años», dijo.
El portavoz agregó: «Estamos abiertos y apoyamos cualquier ajuste de política realizado por los legisladores que se alinee con los intereses de los consumidores».
Los representantes de la industria textil estadounidense destacan la ironía de que los dos candidatos presidenciales estadounidenses se muestren duros respecto del comercio con China, mientras sus propios seguidores compran productos fabricados en ese país para mostrarles su apoyo.