La guillotina sandinista sigue volando cabezas de los sirvientes de la dictadura Ortega-Murillo. El régimen oficializó la “renuncia” de Martha Reyes Álvarez como ministra de Salud.

La salida de Reyes ocurrió desde el viernes 18 de octubre de 2024, pero fue hasta el miércoles 23 que se publicó en el Diario Oficial La Gaceta.

Su «renuncia» se anunció mediante el Acuerdo dictadorial No. 183-2024, el cual únicamente informa sobre su salida, pero no hay detalles sobre quién la sustituirá.

“Se acepta la renuncia de la compañera Martha Verónica Reyes Álvarez, en el cargo de Ministra del Ministerio de Salud”, se lee textualmente en el artículo 1.

“En consecuencia, déjese sin efecto su nombramiento contenido en el Acuerdo Presidencial No. 34-2020, de fecha treinta y uno de marzo del año 2020, publicado en la Gaceta, Diario Oficial No. 63, del primero de abril del año 2020”, añade el artículo 2 del texto oficial.

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Covid-19 muertes ministra
A la recién renunciada «ministra» se le recuerda por su triste papel negacionista de la letalidad del Covid-19 en el año 2020.

Ministra era títere de Porras

Reyes estaba al frente del Minsa desde abril de 2020, cuando asumió tras la destitución de la doctora Carolina Dávila, en medio de la crisis sanitaria por coronavirus y luego de 15 días de confirmarse el primer caso de Covid-19 en Nicaragua.

Se le recuerda por su triste papel de negar las consecuencias del Covid-19 y perseguir a los médicos que orientaban a la población sobre la letalidad de la enfermedad.

La gestión de Reyes, tanto como de las exministras Sonia Castro y Carolina Dávila, quienes fueron nombradas “asesoras de Salud”, se limitaba a obedecer órdenes de los dictadores.

En la práctica, todas las nombradas como «ministras de salud», en realidad hacen de títere del diputado sancionado por corrupción y violación de derechos humanos, Gustavo Porras, sirviente mayor del clan familia Ortega-Murillo.

La «renuncia» de la exfuncionaria se enmarca en una política de purgas internas, despidos masivos y compactación laboral en las filas de la dictadura.

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