Voz de América. En un contexto de crisis e inflación global, los estadounidenses acuden el martes a las urnas para elegir a los integrantes del Congreso y a gobernadores. Te contamos algunas de las claves para entender las elecciones legislativas de Estados Unidos.Son las llamadas elecciones de medio término.
Este martes los electores estadounidenses acudirán a votar en los comicios de medio término, unas elecciones en las que se decidirá la composición de la Cámara de Representantes y el Senado trazando el rumbo de los dos años restantes del mandato del presidente Joe Biden. Si bien los demócratas tienen el control de ambas cámaras, la situación podría cambiar tras los comicios.
¿Cuándo se celebran las elecciones?
Las elecciones de medio término o de medio mandato se denominan así porque se realizan justo en la mitad del período de cuatro años del presidente.Trump critica a Biden y lo señala de «abandonar a Nicaragua, Cuba y Venezuela»
Tienen lugar el martes después del primer lunes de noviembre cada dos años, por lo que este año se celebrarán el 8 de noviembre. Cada cuatro años estos comicios coinciden con las elecciones presidenciales. El caso más reciente fue en el año 2020.
¿Cómo funciona el sistema bicameral de EEUU?
El martes 8 de noviembre los votantes acudirán a las urnas para elegir la composición del Congreso, que está formado por Cámara de Representantes y el Senado.
La Cámara de Representantes está formada por 435 legisladores.
Dichos legisladores son representantes de distritos trazados a lo largo de los 50 estados que integran el país. Los distritos se renuevan cada 10 años con el objetivo de reflejar los cambios de la población y asegurar que cada legislador represente a un número similar de personas.
El Senado, por su parte, está conformado por 100 senadores, 2 por cada estado. En total, hay 535 miembros en el Congreso.
La vicepresidenta Kamala Harris preside el Senado y su voto es decisivo cuando se presenta un empate.
Algunos de los estados más extensos, como por ejemplo Texas, están representados por 2 senadores, igual que estados más pequeños como New Hampshire o Virginia del Oeste.
El caso de Washington D.C. es diferente. Al no ser un estado sino un distrito, la localidad está representada por un legislador que no tiene derecho a voto.
¿Qué se vota?
En estas elecciones los votantes renovarán un tercio del Senado, que equivale a 35 puestos, y se elegirán a todos los integrantes de la Cámara de Representantes, es decir, se escogerán 435 escaños.
Todos los escaños se elegirán mediante el sufragio directo de los ciudadanos, quienes pueden votar en un distrito estatal. De hecho, algunos ya votaron de manera anticipada.
Los electores también elegirán a 36 gobernadores estatales y 3 gobernadores de territorios estadounidenses, además de varias alcaldías y cargos locales.
¿Quién puede votar?
En principio, pueden votar todos los estadounidenses mayores de 18 años. Para poder votar, los electores deben registrarse primero. Una vez el registro se haya completado, los votantes podrán ejercer su derecho a voto en persona, por correo o dejando su boleta en un buzón. Cada estado tiene normas distintas respecto a los diferentes medios de votación.
Por otra parte, algunos estados restringen el derecho a voto de aquellas personas que están condenadas por haber cometido delitos graves.Las personas que voten de manera ilegal podrían enfrentarse a sanciones económicas o incluso podrían ser encarcelados.
Según una encuesta del Pew Research Center, un 72% de los votantes registrados están «extremadamente» o «muy» motivados para votar este año, mientras que un 65% afirma que «realmente importa» qué partido gane el control del Congreso.
¿Qué está en juego?
De momento, los demócratas tienen el control de ambas cámaras. Los republicanos necesitarían obtener cinco escaños para lograr la mayoría en la Cámara y sólo uno para controlar el Senado.
Las encuestas sugieren que los republicanos tienen muchas posibilidades de ganar una mayoría en la Cámara. También vaticinan que es probable que el control del Senado esté más reñido.
Según expertos, si los demócratas pierden el control de la Cámara Alta «será prácticamente imposible» que cualquier proyecto legislativo salga adelante en los próximos dos años. De esta manera, algunas de las políticas de la agenda de Biden, como el derecho al aborto, medidas para el cambio climático, el control de las armas o la ayuda a Ucrania podrían dar un giro radical.
Por otro lado, los expertos subrayan que minorías estadounidenses como la hispana podrían ser claves para decidir quién gana en los comicios.