La Alta Comisionada Adjunta de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), Nada Al-Nashif, presentó una actualización ante la 56ª sesión del Consejo de Derechos Humanos, denunciando la grave situación de los derechos humanos en Nicaragua.
La represión del régimen nicaragüense continúa en aumento, afectando profundamente el espacio cívico y democrático del país, dijo Al-Nashif.
Desde el último informe de marzo de 2024, al menos 30 personas más (5 mujeres y 25 hombres) han sido detenidas arbitrariamente.
En ese informe del pasado marzo, los especialistas a cargo de la investigación determinaron que la pareja dictatorial Daniel Ortega y Rosario Murillo son responsables de la comisión de crímenes de lesa humanidad.
OACNUDH registra los crímenes de los Ortega-Murillo
La oficina registra en total a 23 mujeres y 108 hombres detenidos en relación con la crisis de derechos humanos que inició el 18 de abril de 2018.
Desde ese año, la familia Ortega-Murillo, a través de la policía, el ejército y las instituciones públicas asesinó a 355 personas.
También hirió a más de 4,000 y ha secuestrado, desaparecido, torturado y detenido a más de 10,000 personas.
A la vez, han desterrado a más de 500 personas a la vez que obligaron al exilio y desplazamiento forzoso a casi un millón de nicaragüenses, de una población de 6.7 millones.
De acuedo con la actualización del informe, las detenciones suelen ir acompañadas de juicios sin garantías de debido proceso.
Al-Nashif destacó los casos de personas detenidas en condiciones inhumanas, sometidas a aislamiento prolongado, hambre y sin acceso a atención médica adecuada.
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Dictadura criminal y salvaje
Un caso destacado es el del diputado indígena Brooklyn Rivera, cuya detención no ha sido reconocida por las autoridades.
Además, la defensora de derechos humanos Vilma Núñez, despojada de su nacionalidad en febrero de 2023, enfrenta vigilancia y acoso policial, privándola de sus derechos básicos.
Al-Nashif también señaló la persecución continua de grupos religiosos, con la cancelación de celebraciones católicas y la disolución de asociaciones evangélicas.
Once líderes evangélicos detenidos en diciembre del año pasado permanecen incomunicados y sin acceso a abogados.
La Alta Comisionada Adjunta instó a la dictadura de Nicaragua a liberar a los detenidos arbitrariamente, permitir visitas de abogados y familiares, y restablecer los derechos de aquellos despojados de su nacionalidad.
También subrayó la necesidad de proteger el espacio cívico y democrático y colaborar con la comunidad internacional para garantizar el respeto a los derechos humanos.
Diez aspectos relevantes del informe de OACNUDH:
- Detenciones Arbitrarias: Desde marzo de 2024, 30 personas han sido detenidas en el contexto de la represión del espacio cívico.
- Juicios Injustos: Se documentaron 11 juicios virtuales sin garantías de debido proceso desde marzo de 2024.
- Condiciones Inhumanas: Las personas detenidas enfrentan aislamiento prolongado y falta de acceso a atención médica, medicamentos y artículos de higiene.
- Desapariciones Forzadas: Casos como el del diputado Brooklyn Rivera, cuya detención no ha sido reconocida, constituyen graves violaciones de derechos humanos.
- Hostigamiento a Defensores de Derechos Humanos: Vilma Núñez, de 85 años, enfrenta acoso y vigilancia policial tras ser despojada de su nacionalidad.
- Persecución a Grupos Religiosos: Desde marzo de 2024, se disolvieron ocho asociaciones evangélicas, sumando un total de 311 desde 2019.
- Líderes Religiosos Detenidos: Once líderes evangélicos llevan casi siete meses incomunicados y sin acceso a un abogado.
- Negación de Derechos Básicos: Personas detenidas, especialmente mujeres, son privadas de servicios de salud esenciales.
- Riesgo de Tortura: Las condiciones de detención y el trato recibido podrían equivaler a tortura en algunos casos.
- Llamado a la Acción: La Alta Comisionada Adjunta urgió al Gobierno de Nicaragua a liberar a los detenidos arbitrariamente y restaurar el respeto al Estado de derecho y los derechos humanos.