Por Café con Voz
Los nicaragüenses que se encuentran varados en Panamá y Guatemala, a la espera de poder regresar al país, siguen pasando penurias y aún no reciben el visto bueno del régimen dictatorial de Daniel Ortega para poder regresar.
Pablo Cuevas, asesor legal de la CPDH, informó que los nicaragüenses están prácticamente en la indigencia por el lado panameño y por el lado del triángulo norte, donde siguen pasando penurias por la ausencia total del Estado en la protección de sus derechos.
Cuevas dijo que el personal de la embajada de Nicaragua en Panamá debería facilitarles formas, recomendaciones, requisitos y otras facilidades para que puedan ingresar a Nicaragua.
Anunció que desde la CPDH que mandarían comunicación a las distintas embajadas para recordarlas a las autoridades “que están obligadas a darle respuesta de forma expedida a estas personas”.
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Denuncia ante ACNUR
También informó que valoran si se comunican con la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) para “ver si puede hacer algo según su norma”.
Estos nicaragüenses se quedaron sin trabajo, no tienen familia dónde estar, no pueden comprar alimentos y tomaron la decisión de regresar al país sin embargo no han podido por las trabas que el Gobierno ha impuesto.
“Las embajadas en el extranjero no resuelven, entonces están en una situación de limbo por la ausencia de nuestro Estado, la situación se agrava porque no les permiten regresar a nuestro país a pesar que están demostrando plenamente que son nicaragüenses”, comentó Cuevas.
En un escueto comunicado del 7 de julio, el Ministerio de Gobernación informó que el martes, a las 4:30 de la tarde, arribaron procedentes de Panamá 100 nicaragüenses por el puesto fronterizo de Peñas Blancas, de estos 53 eran varones y 47 mujeres.
“El Ministerio de Salud en cumplimiento a las medidas sanitarias, realizó revisión rigurosa para descartar síntomas de contagio Covid-19 y les dará seguimiento domiciliar en la cuarentena de 14 días”, indica el comunicado.
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Cientos de nicas varados en otros países
Se estima que unos 681 nicaragüenses se encuentran en Panamá, en sectores fronterizos con Costa Rica, a la espera que el Gobierno de Nicaragua autorice su regreso.
Otro grupo de 44 compatriotas se encuentran varados cerca de la frontera de Honduras, en territorio guatemalteco esperando el visto bueno para retornar a Nicaragua.
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Estos ciudadanos han difundido a través de medios de comunicación locales que han sido olvidados por autoridades de la embajada de Nicaragua y que las autoridades migratorias hondureñas no les permiten seguir por falta de documentación requerida por la situación que se vive a causa del Covid-19.
Se estima que el régimen de Ortega no ha permitido la entrada a más de 500 nicaragüenses desde que la pandemia fue decretada por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Muchos de ellos están aún varados en países del Caribe luego de que la pandemia los sorprendiera trabajando en cruceros turísticos.