El Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Managua, Monseñor Silvio Báez, ofició una eucaristía en la Iglesia Santa María del Lago, en Chicago, Illinois, Estados Unidos, en la que sostuvo un encuentro con la comunidad nicaragüense.
En su homilía, aseguró que, en los cinco años de represión en Nicaragua, no todo ha sido negativo.
“Nos hemos vuelto más cercanos y solidarios unos con otros, el dolor nos ha hecho madurar como sociedad, nos hemos vuelto más conscientes de nuestra responsabilidad por realizar un cambio social pacífico y construir una sociedad más justa” dijo el jerarca.
Báez dijo que aun en medio de la opresión y la crueldad a la que sigue sometido el pueblo, este ha demostrado su grandeza y su dignidad, su espíritu indomable y su vocación de libertad y de justicia.
“Los tiranos no han podido someter a nuestro pueblo recio, noble y creyente, que sigue resistiendo, soñando y luchando”, dijo Báez.
Leer además: Dictadura secuestra a periodista Hazel Zamora
Vencer la incertidumbre
Bpaez recordó que Jesús les pidió a sus discípulos que no se inquieten frente a los eventos trágicos de su pasión y de su cruz.
“Son inolvidables sus palabras: “Que no se turbe su corazón, no pierdan la calma, no se dejan robar la paz, crean en Dios y crean también en mí”, recordó.
“En la vida, la incertidumbre, la oscuridad, los problemas, el sufrimiento nos inquietan y muchas veces provocan tristeza o ansiedad. No existe una vida destilada, sin problemas que resolver y luchas que afrontar. También en la historia de los pueblos hay épocas históricas dolorosas, en las que parecen prevalecer la ambición de poder, la irracionalidad de la violencia y el irrespeto a la libertad y a la dignidad de las personas”, añadió.
Leer también: Embajador Kevin Sullivan saldrá de Nicaragua en próximas semanas
Expresó que lo que Jesús quiere es que se viva con “la certeza de que somos amados y cuidados por Dios con un amor entrañable y que ningún esfuerzo que hagamos por construir un mundo más humano y digno se perderá”.
“No siempre podremos entender lo negativo que nos ocurre, pero siempre podremos confiar en que Jesús estará a nuestro lado, ayudándonos a afrontar los problemas con serenidad y sabiduría e ir construyendo un futuro de paz y de justicia para todos”, subrayó.