El Parlamento al servicio de la dictadura de Venezuela aprobó, en primera discusión, un Proyecto de «Ley contra el Fascismo, Neofascismo y Expresiones Similares». La propuesta, que fue presentada este martes, contó con la votación de una mayoría calificada de los diputados y diputadas del régimen, en concordancia con el artículo 204 numeral 1 de la Constitución de ese país.

La que hace el papel de vicepresidenta Ejecutiva del régimen, Delcy Rodríguez, presentó este proyecto de Ley ante el Parlamento Nacional, y seguidamente, el segundo al mando de la dictadura Diosdado Cabello, tomó la palabra para destacar el compromiso de Venezuela en la lucha contra el fascismo.

“Venezuela siempre ha estado en la vanguardia para levantar la voz contra el fascismo, una gravísima enfermedad social”, dijo el inefable Cabello. Resaltó la importancia de la igualdad ante la ley, un principio arraigado en la historia del país y reforzado por la nueva legislación.

Asimismo hizo hincapié en la necesidad de un debate público sobre la ley, invitando a la participación ciudadana para fortalecer la democracia y la paz. “Hagamos estos debates con el pueblo, donde reside la verdad”.

A la vez Cabello recordó lo que calificó «oscuros días» del año 2002 «cuando el fascismo mostró su rostro en Venezuela», obviando las barberies fascistas que ha emprendido la dictadura en contra de los opositores en los más de 20 años que llevan en el poder.

Esta ley, que consta de 30 artículos, fue presentada como un acto de valentía y un paso necesario para enfrentar y derrotar al fascismo. “El campesino de Sabaneta, el conductor, el pueblo te derrotó y te seguirá derrotando fascismo”, declaró Cabello e hizo un llamado para combatir conjuntamente estas ideologías, que tienen el apoyo del imperio, y que siguen en el país para solo llamar a la violencia.

Para perseguir y castigar a opositores

Sin embargo, críticos denuncian que esta ley abre la puerta al control gubernamental de las libertades políticas y de expresión en el país.

La define una amplia gama de posturas ideológicas y expresiones que serán perseguidas. Dentro de estas están el racismo, chovinismo, clasismo, conservadurismo moral, neoliberalismo, misoginia y cualquier forma de fobia contra el ser humano. Además, establece duras sanciones, incluyendo penas de prisión e inhabilitación política, para aquellos que promuevan acciones violentas como medio para ejercer derechos políticos.

El Ministerio Público será el que determine qué mensajes y actos pueden ser interpretados dentro de ese difuso marco de prohibiciones. Las penas para quiernes infrinjan cualquiera de los 30 artículos, pueden ser de seis a 12 años de prisión. Este proyecto de ley, avanza en el contexto de detenciones, amenazas y persecusión en contra de los opositores cercanos a la líder opositora María Corina Machado.¿Podrán postular a alguna de “las Corinas” tras exclusión de la elección en una primera fase?

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