El dictador Daniel Ortega volvió a mostrar su amargura con la Iglesia católica a la que atacó nuevamente en público, calificándola de “mafia” que no representa los principios de Dios ni los de Cristo, lo que provocó la reacción del obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua, quien respondió a al tirano señalándole de «ateo, corrupto y criminal».
“Son una mafia, miren los crímenes que han cometido, cuántos crímenes han cometido y siguen saliendo crímenes todos los días”, cuestionó en un acto público el martes.
Luego que el Papa Francisco se pronunció por la condena de más de 26 años de cárcel a Monseñor Rolando Álvarez, Ortega desató esta diatriba que no solo es contra la iglesia Católica en Nicaragua, sino contra El Vaticano, a cuyo nuncio expulsó en 2022. Papa Francisco «expresa tristeza» por condena a Rolando Álvarez
“¿Quién elige al Papa? ¿Cuántos votos consigue el Papa entre lo que es el pueblo cristiano? Si vamos a hablar de democracia el pueblo debería elegir en primer lugar a los curas del pueblo”, señaló.
De inmediato agregó “que sea el pueblo el que decida y no la mafia que está organizada en el Vaticano”.
Y luego confesó lo que siempre se ha sabido que no respeta a nadie. “Qué respeto les puedo tener yo a los obispos que he conocido si eran somocistas y yo los vi cuando pasó el funeral de Somoza y ahí iban los señores obispos, enterrando a Somoza como si era príncipe de la iglesia”, insistió.
La frustración ante dignidad del obispo de Matagalpa
El dictador, quien el 9 de febrero señaló al obispo Rolando Álvarez de “soberbio”, “energúmeno” y “desquiciado”, por negarse al destierro, aseguró “Cristo nunca fue soberbio, Cristo nunca fue agresivo. Cristo siempre fue solidario”. Un día después en un acto de venganza la justicia orteguista condenó al religioso en un juicio exprés y sin garantías.
“Su mensaje fue de paz y luego, lo torturaron y lo asesinaron (…) pero Cristo resucitó en los pueblos y vive en los pueblos cristianos. No por el ejemplo que pueden dar los obispos, los cardenales y los Papas que son una mafia”, reiteró Ortega.
«Ateo, corrupto y criminal»
El obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua, monseñor Silvio Báez, quien se encuentra en el exilio y recientemente fue despojado de nacionalidad, escribió en su cuenta de Twitter: “¡Cuánta ignorancia, cuánta mentira y cuánto cinismo! Un dictador dando lecciones de democracia; alguien que ejerce en forma ilegítima el poder, criticando la autoridad que Jesús otorgó a su Iglesia; un ateo, corrupto y criminal, confesándose inspirado por Cristo”.