La dictadura de Daniel Ortega, arremetió contra mujeres jóvenes opositoras como el caso de Valeska Alemán Sandoval quien fue secuestrada esta semana y ayer apareció visiblemente golpeada, además de la opositora Zayda Hernández, líder de la Coalición Universitaria 19 de Abril, quien hoy fue citada por la Policía sandinista.
«Una policía y tres antimotines me agarraron en el parqueo de Metrocentro», y luego la llevaron a la cárcel conocida como El Chipote donde la torturaron y la golpearon por dos días, denunció ayer Alemán Sandoval, exatrincherada de la UNAN Managua y que fue expulsada por su participación en las protestas del 2018.
El año pasado Alemán Sandoval intentó entrar a Estados Unidos, pero le negaron el asilo político y la deportaron a Nicaragua.
Ejército Sandinista convocó para reprimir y reprimió
Por su parte, hoy la sancionada Policía sandinista citó para que se presente mañana a la activista Zayda Hernández, en la delegación “Francisco López” del Distrito V de Managua. Según la cita, debe presentarse ante la Subcomisionada Liechen Benítez “con el objetivo de brindar declaración”.
Se desconoce qué tipo de declaración requieren de Hernández, quien ha sido muy activa en Nicaragua realizando plantones y piquetes exprés en algunos puntos de Managua y centros comerciales. A inicios de enero de este año la retuvieron en Rivas cuando regresaba de Costa Rica.
En el 2019 al ir a una marcha cerca de la Catedral de Managua, Hernández fue secuestrada por cuatro paramilitares armados que la encerraron en una casa, la golpearon, la amenazaron y le aconsejaron que se fuera del país.
Hernández pidió hoy a través de su cuenta de twitter “por la salud física y mental” de Valeska Sandoval. “Es indescriptible expresar lo que siento al ver las fotografías y observar su rostro y cuerpo lleno de hematomas. Cada día que pasa caminamos sobre torturas, persecución, encarcelamientos e inclusive sobre la muerte”, indicó.
Oposición unificada a Luis Almagro: “Demande elecciones libres a Daniel Ortega”
También la dictadura ha montado una campaña en contra de varias estudiantes de la Universidad Centroamericana que esta semana realizaron una protesta en conmemoración de la rebelión cívica de abril en la que murieron más de 320 personas a manos de Policías, paramilitares y grupos de choque.