El analista político Bosco Matamoros, manifestó que las propuestas de reformas electorales realizadas por el sandinismo, beneficiarán al régimen de Ortega a quedarse en el poder por cinco años más, producto de la distracción de la oposición que se centra el buscar candidatos a la silla presidencial. La aprobación de la Ley Renacer, ha tomado velocidad.
Las recientes reformas a la Ley 331 o Ley Electoral, propuestas por la bancada del Frente Sandinista de Liberación Nacional por órdenes del dictador Daniel Ortega, no respetan las demandas de la comunidad nacional e internacional y podrían acelerar la aprobación de la propuesta de Ley Renacer que viene a ser más drástica en el control del financiamiento de organismos internacionales, a como lo hace la Ley Nica Act; dijo hoy el exembajador de Nicaragua en España y analista político Bosco Matamoros.
Matamoros dijo que Daniel Ortega ha demostrado de ser capaz de tomar medidas osadas, que no se intimida fácilmente, pero también es realista de la política y sabe la oposición que tiene enfrente, pero al margen de esa debilidad de los nicaragüenses, los Estados Unidos, aunque son lentos, una vez que toman una decisión no hay manera de que vuelvan para atrás.
«La Ley Renacer ha entrado una dinámica que con esto que acaba de hacer Ortega, puede coger velocidad y cuando ese tren toma esa velocidad, ese acto de aceleración (reforma de Ortega) puede tener como resultado que ese tren te aplaste», dijo Matamoros.
Según Matamoros, el régimen de Ortega solo cuenta con préstamos internacionales del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), y recibe fondos de las demás instituciones bancarias cuando hay desastres naturales, como sucedió en 2020, con más de 700 millones de dólares para atender los estragos ocasionados por el paso de los huracanes Eta e Iota, sin embargo, la Ley Renacer viene a ser más contundente el exigir a los bancos multilaterales a dejar de conceder financiamiento para Nicaragua por la violación de Derechos Humanos y por no dar pasos para la democratización del país, a como lo exige la propuesta bipartidista estadounidense.
«Creo que sería un acto de extrema temeridad pensar que se va a llevar a cabo y que se va a aceptar un proceso electoral con esa reforma, aquí (Estados Unidos) no ha sido recibida de buena manera y la iniciativa Ley Renacer, lo que busca es que haya una salida de la crisis por la vía de elecciones libres y transparentes, es decir no hay manera de que se acepte esa reforma y lo que resulte de ella», agregó.
Lo que significa Renacer
La Ley de Reforzamiento de la Adherencia de Nicaragua a las Condiciones para la Reforma Electoral (Renacer), demanda una mayor supervisión sobre los préstamos otorgados por el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial a Nicaragua para garantizar que los fondos están siendo “usados con los fines previstos”, además de plantear acciones concertadas de sanciones entre Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea para que de manera selectiva se castigue a quienes obstruyan los comicios.
“Cualquier gobierno que resulte electo con esas condiciones, no va a gozar de legitimidad internacional, Nicaragua no es Venezuela, Daniel Ortega tiene enorme vulnerabilidades, aquí hay una disyuntiva en Nicaragua, Daniel Ortega está jugando sus cartas abiertas y está viendo hasta donde puede jugar, aquí ya no solo serían afectados personeros del gobierno, sino instituciones, ya no se obtendrían recursos, no más solo por la vía humanitaria”, aseguró.
“Creo que el gobierno de Daniel Ortega está demostrando la extrema debilidad en la que se encuentran su gobierno, pero encontramos una oposición que no sabe qué hacer”, agregó.
Para este académico, el régimen de Ortega ni siquiera cumple con su palabra que poner en macha el memorándum de entendimiento firmado con la Organización de Estados Americanos (OEA) en 2017, en las que se comprometía a hacer cambios de magistrados, depuración del padrón electoral y a institucionalizar al Poder Electoral.
“Me sorprende que después de tanto tiempo, al día de hoy no conocemos los términos del memorándum de entendimiento, que se ha mantenido como un acuerdo secreto entre la OEA y el Gobierno, tiene cuatro elementos fundamentales, depuración del padrón electoral, conteo a pie de urna, observación nacional e internacional para que hayan elecciones transparentes…”, dijo el catedrático.
El sandinismo este miércoles envió a la Comisión Especial con Carácter Constitucional para los Asuntos Electorales, el anteproyecto de Ley de Reforma y Adición a la Ley No. 331, Ley Electoral, con la que buscan aprobar en un combo tanto la reforma electoral como el nombramiento de los diez magistrados del Consejo Supremo Electoral (CSE), a principio de mayo. La Comisión Especial que integran cinco diputados sandinistas y dos de sus aliados del PLC y del PLI, verán ambos temas.
Esa reformas platea que, los integrantes de las Juntas Receptoras de Votos usualmente dominadas por el partido en el poder, en este caso el Frente Sandinista de Liberación Nacional, podrían cambiar el resultado de las actas de forma oficiosa.
“Revisar y si fuese necesario, corregir de oficio, la suma aritmética de los votos de las actas de escrutinio de las Juntas Receptoras de Votos de su circunscripción”, cita el artículo 19 de la propuesta de Ley
Asimismo, plantea derogar el techo del 40 por ciento o 35 por ciento más diferencia de cinco puntos porcentuales para ganar las elecciones presidenciales según la propuesta de reforma electoral. El ganador sería declarado por mayoría simple, lo que permitiría que el FSLN ganara las elecciones incluso con menos votos.
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Reformas enviadas por el sandinismo buscan perpetuar en el poder a Ortega
Para Matamoros, las propuestas de reformas a la Ley 331 o Ley Electoral, son nada mas que una barrera para la oposición y camino abierto y libre para que el régimen sandinista consolide su totalitarismo por cinco años más.
“El anuncio hecho por la bancada del Frente Sandinista, refleja que es una propuesta para y por el Frente Sandinista, trata de elaborar un proceso electoral que se caracteriza en poner impedimentos para el proceso electoral de Nicaragua, estoy viendo que Ortega prácticamente está poniendo de rodillas a la oposición”, señaló.
De acuerdo con el experto en relaciones internacionales, la oposición nicaragüense no ha tenido la capacidad de responder con contundencia ante la amenaza de Daniel Ortega de perpetuarse en el poder por cinco años más, por el contrario, se han dedicado a hacer comunicados y seguir con sus aspiraciones presidenciales.
Opositores distraídos en candidaturas
“Ese carnaval electorero de la oposición nicaragüense se ha concentrado en buscar candidatos cuando el tema trascendental es el tema de reformas electorales, han mantenido una clara desorganización que claramente representa una falta de responsabilidad política, visión estratégica y visión para el país», dijo Matamoros.
«No es solo responsabilidad del Frente Sandinista, sino la negligencia irresponsable de la oposición nicaragüense; esta situación que se está presentando en Nicaragua, demuestra claramente de la clase de políticos nicaragüenses que no tienen a capacidad de manejar dos situaciones de crisis simultáneamente, no se puede buscar candidatos ni tratar reformas electorales al mismo tiempo”, argumentó.
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Oposición no está preparada para ser oposición, ni opción
Además, Matamoros sostiene que la oposición no ha trabajado con la ciudadania para cautivar en la población la necesidad de realizar reformas electorales y reclamar ante la estrategia del régimen de Ortega, que no quiere dar condiciones para la realización de elecciones generales en Nicaragua.
“Hemos visto es que hay un apetito canibalezco por llegar a la presidencia, por parte de algunos y otros garantizarse un buen salario y una buena siesta en la Asamblea Nacional”, sostuvo.
El analista también criticó a la oposición de querer mostrarse a través de los medios de comunicación como los que están promoviendo o buscando la unidad, sin embargo, reveló que lo hacen para que no los califiquen de divisionistas.
“Daniel Ortega los ha puesto de rodilla, los ha desenmascarado, esta hipocresía llega a tal punto que se van a ver obligados en tener que decir que si van a participar o no en las elecciones, y de determinar con eso el presente y futuro del país, es un fracaso de la oposición nicaragüense», indicó.
Matamoros dijo que la actitud de la oposición debería de dirigirse a las entidades internacionales como la OEA, para exigir el cumplimiento del memorándum de entendimiento y presionar a Josep Borrell, Alto Representante de Política Exterior de la UE y vicepresidente de la Comisión Europea, a acatar la resolución aprobada por el Parlamento Europeo en donde exigen que se sancionen a más funcionarios nicaragüenses por no democratizar al país y no hacer elecciones transparentes en Nicaragua.
“No creo que alguien tenga la capacidad de dar una respuesta de parte de la oposición”, consideró.
Sanciones al Ejército se acercarán y darán duro golpe
El analista dijo que el papel hecho por el Ejercito de Nicaragua, plegado a las políticas de represión del régimen sandinista, podría hacer que las sanciones de Estados Unidos en contra de las Fuerzas Armadas, sea un golpe duro para Ortega, puesto que los militares se verían forzados a elegir si siguen apoyando al sandinismo o ayudan a recobrar la institucionalidad del país.
“El gran aliado de las sanciones ha sido el gobierno de Nicaragua que ha violentado las normas constitucionales…, si Daniel Ortega da una respuesta constructiva a esta situación, de parte del Gobierno norteamericano habría una actitud constructiva que comenzaría aportando recursos para facilitar un esquema que beneficiaria a todos los sectores”, añadió.
Matamoros dijo que no es posible que el Gobierno de los Estados Unidos declare al Frente Sandinista como una organización terrorista, puesto que a pesar de que han violado derechos humanos, no se cumplen criterios para que sean calificados como tal.
“Quienes esperan que haya una declaración que califiquen al Frente Sandinista como terroristas, están equivocados, yo no he escuchado en ningún momento que ha sido contemplada la posibilidad de que sea declarado como organización terrorista al Frente Sandinista, eso no va a resolver los problemas de Nicaragua, tenemos que centrarnos en temas más importantes”, recomendó.
Al finalizar, Matamoros resaltó que “Daniel Ortega está aislado internacionalmente, la oposición nicaragüense tiene el respaldo y simpatía internacional pero no han logrado constituirse en una alternativa tangible, válida, que crean los nicaragüenses en esa alternativa, el dado está en las manos de la oposición, vamos a ver si juegan sus cartas”.
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