La dictadura de Daniel Ortega confirmó hoy la muerte del veterano asesor de relaciones internacionales y económicas del Frente Sandinista de Liberación Nacional, FSLN, sancionado por Estados Unidos, Paul Oquist Kelley. El asesor de Ortega murió en el Hospital Militar, por problemas respiratorios vinculados al Covid-19, según fuentes médicas,
«Hoy ha hecho su viaje a la Casa del Señor nuestro Querido Compañero, Doctor Paul Oquist Kelly, que sirvió al Pueblo, a las Familias, a todos los nicaragüense, con Amor, Fidelidad, Compromiso y Valentía infatigables», indicó la dictadura en una nota de prensa difundida por medios oficialistas, firmada por el tirano Ortega y su consorte Murillo.
Oquist, en los 80 era el representante del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Nicaragua. Renunció y pasó a trabajar a la Presidencia como Asesor Técnico de Daniel Ortega y el FSLN. Era el Secretario de Políticas Públicas del régimen y se especula que falleció hoy 13 de abril producto del Covid-19.
Hasta el 2006 el representante del PNUD en ese país. Al ganar Daniel Ortega la presidencial con el 38% en 2006, renunció a su trabajo y regresó a Nicaragua. El asesor del dictador, fue el artífice del proyecto gran canal interoceánico, fue junto al ya fallecido Kamilo Lara.
Oquist fue sancionado por Estados Unidos, el 9 de octubre de 2020 por representar a la administración sandinista a nivel internacional en una variedad de roles y jugar un papel importante en “la difusión de desinformación para encubrir los crímenes del régimen y las fechorías de horribles abusos a los derechos humanos” de acuerdo al anuncio del gobierno estadounidense.
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Los lamentos de Porras y Castro
Tanto el Presidente de la Asamblea Nacional, Gustavo Porra y el diputado Edwin Castro, confirmaron la muerte de Oquist Kelley, uno de los más de veinte funcionarios de Ortega sancionados por Estados Unidos debido a corrupción y violaciones de derechos humanos. Estados Unidos lo sancionó por considerar que «jugaba un papel principal en la difusión de la desinformación para encubrir los crímenes del régimen».
Oquist Kelley era el operador internacional de Ortega para que le quitaran las sanciones a los funcionarios y familiares del dictador debido a la represión de abril de 2018 que dejó más de 300 civiles muertos.
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