El defensor de los derechos humanos, Gonzalo Carrión, del organismo Nicaragua Nunca +, alertó que «hay un gran riesgo» de que las elecciones generales de noviembre se desarrollarán en un contexto de violencia debido a que el partido Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), utilizaría a sus grupos de choque incluidos los paramilitares, para «causar una ola de miedo para evitar que la gente vaya a votar».
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«No hay un escenario pero como contexto para ir a unas elecciones, como el que enfrenta Nicaragua, el próximo abril se cumplen tres años de una brutal represión y persecución sistemática que se resumen en los crímenes de mesa humanidad» cometidos por el régimen sandinista», afirmó Carrión.
En declaraciones a Café con Voz, el activista recordó que las elecciones suponen el «derecho universal de elegir y ser electo» para cargos públicos en plena libertad, sin embargo en el caso de Nicaragua «ese derecho se anuló desde el 2008», por los fraudes cometidos por el FSLN con la complicidad de los poderes electoral y judicial, que responden a los intereses del dictador Daniel Ortega.
Nicaragua realizará elecciones de presidente y diputados el 7 de noviembre del 2021, en las que Ortega buscará su cuarto mandato consecutivo. Para conseguirlo, según Carrión, el régimen usará todos los métodos de intimidación, hostigamiento dónde los paramilitares que confirmó para acabar con las protestas sociales serían útiles para crear un escenario de violencia para impedir que la gente se anime a votar.
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Refirió que » aún cuando la dictadura está urgencia de algo de legitimidad, no está dispuesta a ceder el poder y eso implica el control del sistema y por supuesto el estado de terror con los paramilitares y grupos de choque», afirmó Carrión.
Sin embargo, el directivo del colectivo Nicaragua Nunca + señaló que «a pesar del clima de represión y la adversidad sabemos que los nicaragüenses, en su mayoría quiere votar para acabar con este régimen, y debemos aspirar a que la gente vote masivamente».