Rosario Murillo, vocera de la dictadura, vomitó ofensas en contra de los movimientos opositores y particularmente en contra Cristiana Chamorro, hija del Mártir de las Libertades Públicas Pedro Joaquín Chamorro y doña Violeta Barrios de Chamorro, la mujer que sacó del poder a Daniel Ortega del poder en las elecciones de febrero de 1990.
Murillo sancionada por violadora de derechos humanos y corrupta, en su letanía del mediodía, exigió una vez más a la comunidad internacional “respeto” a los asuntos internos de Nicaragua. “Respeto que es lo que reclamamos al mundo, no interferencia, no pretender regir los destinos de otras naciones, de otros pueblos, no pretender erigirse en quienes deciden por injerencia el destino de nuestra patria”, dijo la consorte de Ortega que se niega a que hayan reformas electorales que le permitan al país votar y elegir libremente.
La vocera dictatorial añadió que “los nicaragüenses tenemos el derecho a definir nuestro proceso, nuestra ruta, nuestro camino, nuestro destino entre nicaragüenses y el derecho que tenemos los nicaragüenses de construir una unidad que ha experimentado fracturas provocadas y promovidas desde el imperio pero una unidad que no se expropia, la unidad por el bien común en Nicaragua no tiene otro dueño que no sea el pueblo nicaragüense».
Desatada contra Cristiana Chamorro
Roario Murillo en su tartufa intervención, mostró su amargura contra los opositores, a quienes atacó luego que en los últimos días se han presentado posibles candidatos a la presidencia de la República.
“Aquellos que se confunden y andan buscando bendiciones donde no deben porque el pueblo es el que bendice, también los expedientes, es decir la historia de vida, de quienes buscan bendición», dijo.
«Todos tenemos derecho al bienestar, todos tenemos derecho a sentirnos dignos, en estos tiempos nuestro derecho supremo no lo puede violentar nadie, ni los ungidos, un montón de ungidos andan por ahí, ¿ungidos por quién? ni siquiera su trayectoria de vida los defiende, ni los hace ponerse de pie, agachados son y vendepatrias son y prácticamente no sólo el personaje o la personaje, sino una historia de familia que de patrimonio heroico no tiene nada porque el heroísmo es del pueblo”, dijo Murillo en un ataque directo a Cristina Chamorro, quien el lunes no descartó aceptar una candidatura presidencial, si se logra la unidad de la oposición.
Arrecia su campaña electoral
Murillo siguió en abierta campaña electoral al afirmar que el régimen criminal de la que es segunda al mando, está “orgulloso” de los programas y proyectos que desarrolla en el país.
“Nos sentimos orgullosos de nuestros procesos sociales, de nuestro proceso de reconciliación, de la capacidad que tenemos de protagonizar proyectos y programas económicos, sociales, culturales en vida buena, nunca crímenes, no terrorismo destructor, nunca olvidará el pueblo nicaragüense a quienes interrumpieron este proceso de desarrollo que traía nuestra Nicaragua, no es lícito perdonar, olvidar a quienes irrumpieron para alterar la convivencia pacífica de las familias nicaragüense, imposible olvidar, muy difícil, ahí están unos cuantos los que quieren que olvidemos el terror esas noches de cuchillos largos que ellos protagonizaron”, dijo amargada la autora de la orden «vamos con todo».