En menos de 15 días se reporta otro derrumbe en una mina artesanal en Nicaragua. Los güiriseros que lograron escapar de la tragedia, reportan a al menos unas 10 personas que quedaron bajo sedimento y escombros.
Entre ocho y 16 personas que laboraban como güiriseros, quedaron soterradas bajo escombros y sedimento de una mina en la comunidad de las Brisas en el municipio de Rancho Grande del departamento de Matagalpa.
En menos de 15 días esta es la segunda tragedia que se reporta luego del derrumbe de otra mina artesanal en el municipio de San Carlos del departamento de Río San Juan; y la tercera desde noviembre, cuando se reportó el deslave del Macizo de Peñas Blancas en el mismo departamento norteño de Matagalpa que dejó a más de 15 personas muertas.
De acuerdo con algunos especialistas, la saturación de agua en los suelos todavía persiste en la zona del Caribe, Centro y Norte de Nicaragua, luego del paso de dos huracanes de categoría cuatro que impactaron a esa región del país.
Jorge Berrios, experto en temas de rescate, dijo que el derrumbe de la mina en Rancho Grande, se debe al descontrol de parte del Estado al permitir que se realicen este tipo de labores sin las debidas medidas.
El experto agregó que el deslave de esas minas, pudo haber sido provocada por la humedad que permanece en el suelo debido a las lluvias de los últimos meses.
“Se ve un nivel de negligencia de parte de todo el sistema de prevención de desastres en Nicaragua, tiene que ver las instituciones de respuesta de rescate, el Ministerio de Gobernación con sus Bomberos Unificados, desgraciadamente, lo que predomina es el sistema partidario, manda más un político de la región que un especialista”, dijo Berrios.
Este rescatista nicaragüense aseguró que el régimen de Daniel Ortega también ha sido negligente en permitir que se abran minas artesanales, sin las debidas normativas vigilancia lo que provoca que no se cuente con un plan maestro para este tipo de incidente.
El ambientalista y director de la Fundación del Río, Amaru Ruiz, durante una entrevista a Café con Voz, había advertido del aumento de la minería artesanal e ilegal en el centro y norte y reservas protegidas indígenas del país. Lo que a su juicio, ha provocado el deterioro de la tierra y aumentaba el peligro para las personas que se dedican a la labor de extracción de minerales.
“Consideramos importante detener esta actividad porque estamos de cara a que sucedan otros desastres como estos, hay otros 120 puntos donde se practica la minería artesanal”, manifestó Amaru Ruíz a Café con Voz.
Para Berrios, Nicaragua no tiene capacidad para rescatar a personas soterradas en las minas, por lo que se debería de pedir ayuda internacional con los países de la región para que ayuden con el salvamento y rescate de las personas soterradas.
“Después solo sale un comunicado en menos de 48 horas diciendo que no se pueden recuperar los cadáveres, (y) es obligación del estado de dar respuesta a este tipo de incidentes, ya debe de haber un protocolo y de llamamiento internacional si no hay capacidad operativa en el país”, consideró Berrios.
Al cierre de esta nota, las autoridades del régimen sandinista no habían pronunciado una explicación de las labores de búsqueda y rescate de los más de 16 mineros soterrados, aunque en vídeos que circulan en las redes sociales, se ve la presencia de bomberos y efectivos de la sancionada policía sandinista.