El juicio que se iniciará el próximo lunes 24 de agosto en contra del excanciller de Nicaragua, Francisco Aguirre Sacasa, es promovido por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, quienes son realmente los que lo acusan, pues el párroco Santos Leonardo Murillo Martínes, asegura que no es una acción de la Iglesia Católica.
“Ni yo como párroco, ni la diócesis está acusando al señor Aguirre. La Iglesia no acusa, quizás es el Estado”, dijo a Café con Voz el párroco de la Iglesia San José Obrero, de Granada, donde el mes de julio fueron robadas las campana.
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De acuerdo al sacerdote, el no ha sido notificado al juicio contra Aguirre Sacasa y explicó que las campanas se las entregaron “y con eso basta, además, la Iglesia no acusa a nadie”.
Aguirre Sacasa aceptó haber comprado las campanas, mismas que fueron requisadas en su casa por la Policía sandinista.
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De acuerdo a un penalista, el robo de las campanas está tipificado como robo de orden público y, por tanto, en este caso es el Estado a través de la Fiscalía, institución secuestrada por Ortega, quienes acusan a Francisco Aguirre Sacasa.
“El delito es de orden público y no privado, y por esa razón acusa la fiscalía”, dijo el abogado, quien no quiso ser identificado.
Aguirre Sacasa, luego del incidente en el que se vio envuelto ha expresado a los medios de comunicación que se trata de un trasfondo político para dañar su imagen.
