La 54.ª Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA) se lleva a cabo en Asunción, Paraguay, sin la presencia de Nicaragua, que desde el 19 de noviembre de 2023 oficializó su salida del organismo.

La ausencia del régimen de Daniel Ortega, que ha decidido ausentarse para evitar enfrentarse a las críticas sobre las violaciones de derechos humanos en su país, es uno de los temas más candentes en el foro.

La OEA, a pesar de la retirada de Nicaragua, sigue advirtiendo sobre la grave situación en el país centroamericano.

Asamblea General demanda fin de la represión en Nicaragua

En esta Asamblea, el plenario analizará la situación y se espera que se emita una declaración contundente.

El proyecto de resolución que demanda al régimen de Ortega el «fin de la impunidad y la liberación de todos los presos políticos» fue aprobado por unanimidad por el Consejo Permanente de la OEA el 18 de junio.

La Asamblea también se lleva a cabo sin la representación de Venezuela, que ha estado ausente en las dos últimas ediciones.

La situación de Venezuela plantea desafíos únicos, especialmente tras el fin del llamado Gobierno interino de Juan Guaidó.

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Nicaragua estará ausente de la 54 asamblea general de la OEA en Paraguay.

Venezuela, otro represor ausente en Asamblea General

Con las elecciones presidenciales del 28 de julio en el horizonte y una campaña marcada por la inhabilitación de candidatos y la detención de opositores, Venezuela será un tema de discusión, aunque no existe una propuesta específica de resolución o declaración dedicada al país caribeño.

La OEA también abordará la cuestión de las Malvinas, un tema que ha cobrado relevancia con la llegada al poder del presidente argentino Javier Milei, quien ha reconocido la soberanía británica sobre las islas, aunque sin renunciar a la reclamación argentina.

El foro de la OEA, que reúne a cancilleres y representantes de 21 delegaciones hasta el 21 de junio, pone énfasis en la integración y la seguridad para el desarrollo sostenible de la región.

La situación política y de derechos humanos en Haití, Nicaragua y Venezuela se sitúa entre las preocupaciones centrales.

EEUU lidera condenas a dictaduras

Estados Unidos, representado por el subsecretario de Estado Richard Verma y el encargado para América Latina, Brian Nichols, llega con la misión de impulsar el apoyo a una misión de seguridad en Haití y condenar las violaciones de derechos humanos en Nicaragua.

La crítica a Nicaragua es un tema central, ya que su ausencia se percibe como una evasión de la responsabilidad ante las graves acusaciones internacionales.

Paraguay, el país anfitrión, está representado por el ministro de Exteriores, Rubén Ramírez, quien desempeña un papel clave en las deliberaciones de esta asamblea crucial para el futuro político y de derechos humanos de la región

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