El presidente de la Conferencia Episcopal de Irlanda, Eamon Martin, pidió al Gobierno de su país que impulse la liberación del obispo de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, quien el pasado 04 de agosto cumplió un año de infame encierro en Nicaragua.
El arzobispo escribió al Primer Ministro irlandés, Micheál Martin, para expresar su “grave preocupación por la situación en Nicaragua y la persecución de los miembros del clero, así como de otros que expresan críticas al régimen”.
Martin pidió que el Gobierno de Irlanda “haga gestiones ante el gobierno de Nicaragua, pidiendo la liberación de Monseñor Rolando Álvarez, y el fin de la intimidación y persecución de todos los que defienden los derechos humanos en Nicaragua”.
Monseñor Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa, ha sido una voz destacada de protesta contra la supresión de los derechos humanos que ha ocurrido en Nicaragua producto de la represión ordenada por el dictador Ortega. Se cumple un año del secuestro de Monseñor Rolando Álvarez
Primer ministro respondió preocupado
El Primer Ministro respondió que también seguía “gravemente preocupado” por la situación en Nicaragua.
Agregó: “La continua represión de las voces disidentes, incluidos los líderes religiosos, y la campaña de represión contra la sociedad civil y los medios independientes, junto con el retroceso en las normas democráticas, son inaceptables”.
“Quiero asegurarles que mi departamento y yo, incluso a través de la Embajada de Irlanda en México y junto con los estados miembros de la UE… estamos siguiendo de cerca la detención del obispo Álvarez y seguiremos pidiendo su liberación inmediata e incondicional, como así como la de todos los demás presos políticos restantes”, sostuvo el Primer Ministro irlandés.
El Primer Ministro indicó que “Irlanda y la UE han utilizado todos los canales de compromiso disponibles para pedir a las autoridades nicaragüenses que pongan fin a la represión y restablezcan el pleno respeto de los derechos humanos en Nicaragua”.
El arzobispo reaccionó diciendo que estaba agradecido “por la preocupación expresada por la difícil situación del obispo Álvarez y otros que están injustamente encarcelados, y los esfuerzos de usted y su personal en defensa de los derechos humanos en Nicaragua”.
El obispo fue sentenciado a 26 años de prisión en febrero de 2022, luego de negarse a abordar un avión con otros 222 secuestrados políticos a los que el dictador Daniel Ortega, expulsó del país. El obiso fue declarado culpable de una serie de cargos falsos, incluida la traición a la patria.
«Monseñor Rolando Álvarez… quien se encontraba bajo arresto domiciliario desde agosto de 2022, se negó a abordar el avión”, dijo Martin. «Fue detenido, juzgado y condenado a 26 años por los delitos de concierto para delinquir, difusión de noticias falsas, obstrucción a la justicia y desacato», añadió el arzobispo Martin.
Del cierre de las más de 3,000 ONG
Asimsimo el líder católico irlandés dijo que, en los últimos cinco años, el régimen de Ortega “no solo ha encarcelado a cientos de personas que desafiaron la creciente autocracia del régimen”, sino que también ha cerrado más de 3.000 organizaciones no gubernamentales, universidades y asociaciones, incluidas 29 organizaciones religiosas.
Destacó cómo la organización benéfica irlandesa Trócaire “se vio obligada a cerrar sus operaciones en Nicaragua a principios de 2022”.