En aislamiento y con aforo limitado, la dictadura sandinista celebró su 44 aniversario del derrocamiento de la dictadura de los Somoza, en un espacio cerrado y con un acto esencialmente musical.
En las imágenes divulgadas se observó un acto completamente cerrado y con alta seguridad para el dictador Ortega y Murillo en las afueras del antiguo estadio nacional de beisbol ahora llamado “Roberto Clemente”.
Los dictadsores encabezaron el acto del 19 de julio en esa plazoleta donde antes estuvo el caballo del dictador Somoza y que ahora está Sandino montado en una burra, y que está ubicada 1.3 kilómetros de su vivienda, apenas a 350 metros de distancia del perímetro de seguridad de El Carmen.
De hecho se trató de la conmemoración más reducida de la «Revolución Sandinista», que antes significaba un «baño de masas». Ni un solo jefe de estado en la tarima acompañó a los dictadores, quienes citaron a altos funcionarios del régimen, jefes de las fuerzas armadas, a la Juventud Sandinista y su familia.
Ni siquiera los invitados infaltables en anteriores citas: Nicolás Maduro o Miguel Díaz Canel, presidentes de Venezuela y Cuba respectivamente. Una imagen que confirma lo solos que están producto del aislamiento internacional y el desprestigio que el régimen sufre debido a su brutal represión.
“Agradecemos a las delegaciones que nos acompañan de Angola, Burkina Faso, Mozambique, Nigeria; de Eurasia: Bielorusia, Rusia, Osetia del Sur… Republica Islámica de Irán, Corea del Norte, pueblo palestino, hermanos de Cuba, Honduras”, enumeró la vocera dictatorial Murillo.
La consorte de Ortega, despotricó contra los medios de comunicación y periodistas independientes después de la primera media hora musical.
“Nos oponemos a la decadencia del Espíritu. ¿Cómo entender ese absurdo coro de serpientes, de víboras traicioneras, de fabricantes de mentiras, de denigrantes a sueldo, de mentecatos y falsarios? ¿Cómo entender a los profesionales del servilismo, a los sicarios, mercenarios y asesinos que se arrastran para seguir a sus amos?”, dijo Murillo, con la boca espumosa.
“Tomás, los traidores de la patria hoy están pudriéndose en el basurero de la historia”, añadió flamígera.
Se refiere a la Celac
Después de casi dos horas de concierto musical, con una buena parte de las canciones robadas a los hermanos Mejía Godoy, el dictador Ortega tomó la palabra y ofreció una larga intervención en la que hizo un recuento de los héroes nacionales de Nicaragua, con el libreto que saca siempre del baúl de un barco hundido en el mar.
Ante la poca capacidad de convocatoria, el gobierno ordenó celebraciones del 19 de julio a nivel local en los barrios y en las instituciones del Estado. “Desde que se inició este acto, en todos los municipios del país, en cada barrio, en cada comarca, están las familias, los jóvenes reunidos frente al televisor, dándole seguimiento a este acto que estamos transmitiendo en cadena nacional e internacional”, justificó Ortega durante su discurso.
Y aprovechó en algún momento de su desesperante palabrerío, para hablar de temas actuales, atacando a la Unión Europea y a la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, Celac.
Nicaragua fue el único país que se opuso a la condena por la invasión de Rusia a Ucrania. El dictador Ortega aseguró que enviará una queja a Ralph Gonsalves, “El Tío Ralph”, quien es presidente de la Celac, por haber aprobado una declaración de condena contra la invasión de Rusia a Ucrania.
“Quisieron introducir unos párrafos donde inculpaban a la Federación Rusa sobre el conflicto con Ucrania. No tenía sentido incluir en la agenda. Se sacan miles de millones para Ucrania, pero no sacan nada para la paz, el medioambiente y combatir la pobreza en la región latinoamericana”, se refirió el dictador.
“Y luego comunicaron que salió el acuerdo y dicen que Nicaragua no se sumó, entonces no hay acuerdo. Por eso decimos que La Unión Europea está haciendo daño a la Celac. La Unión Europea está metiendo la cizaña en la Celac”, añadió.
Además hizo un llamado al presidente de Colombia, Gustavo Petro, a reconocer el fallo limítrofe de la Corte Internacional de Justicia de la Haya de 2012, que entregó a Nicaragua alrededor de 75 mil kilómetros cuadrados de su plataforma marítima.
“Ellos están reconociendo el fallo de la Corte, nosotros lo estamos acatando, ¿pero el fallo de la corte que nos beneficia a nosotros lo van a acatar? Ahí le digo al presidente Petro que ahí quedamos 1-1 y tienen que acatar”, dijo Ortega al referirse al fallo de la Corte que frenó las pretens.iones de la dictadura de despojar a Colombia de las islas San Andrés y Providencia.
Ninguno de los dictadores, ni Ortega ni Murillo, tocó el tema de las sanciones impuestas por Estados Unidos el mismo miércoles 19 de julio a 13 funcionarios de su régimen, quienes fueron añadidos a la lista de Actores Corruptos y Antidemocráticos, conocida como «Lista Engel».
Todos los nuevos sancionados son los responsables de la desnacionalización, destierro y confiscación de más de 300 opositores, entre ellos, 222 ex presos políticos. EEUU “felicita” a la dictadura con 13 nuevos sancionados