El dictador Daniel Ortega, dijo este miércoles que no le interesa asistir a la Cumbre de las Américas, organizada por Estados Unidos porque ir significa embarrarse de excremento.
Ortega emitió un extenso palabrerío desde el Centro de Convenciones Olof Palme en Managua, en conmemoración del 127 aniversario del natalicio de Sandino.
“Nosotros no vamos a estar rogándole por ir a su cumbre. No nos estimula su cumbre. Entendemos las preocupaciones y las actitudes de gobiernos latinoamericanos que han estado cuestionando que están marginando a Venezuela, Cuba y Nicaragua. No nos interesa ir a esa cumbre, que es ir a llenarse… ya sabemos de qué”, dijo el dictador evitando la palabra excremento mientras sus serviles le aplaudían.
Ortega aseguró que confía en la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, CELAC, para sostener conversaciones con la Unión Europea y Estados Unidos.
“No debemos olvidarnos que tenemos la CELAC, un instrumento poderoso para reunirnos con la Unión Europea”, añadió
Ortega reconoce crisis económica
Por otro lado, el dictador reconoció que existe un impacto económico en Nicaragua a raíz del conflicto entre Rusia y Ucrania, por lo que “muchos proyectos” tendrán que reajustarse.
“Tenemos que reajustar los programas que veníamos trabajando porque los tiempos han cambiado. El mundo era otro antes de que se produjera este enfrentamiento entre la OTAN y la Federación de Rusia”, señaló.
El tirano dejó entrever que el apoyo que eventualmente Rusia brindaría a la dictadura, se vio mermado por la invasión a Ucrania y las consecuencias que esto ha tenido para el mundo.
“Teníamos un excelente programa y un excelente presupuesto, pero tenemos que justarlo a las circunstancia, concentrando los recursos donde nos den los mejores resultados”, señaló.
«Política de ahorro»
El tirano reconoció que Nicaragua debe enfrentar una política de ahorro, reajustando presupuestos para sumir alzas energéticas.
“Lo primero que hemos hecho es garantizar que el combustible, el gas, la tarifa de energía, la de agua, que no se incrementen. Esto implica hacer una política de ahorro, reajustar presupuestos para garantizar que el motor de esta economía no se vea debilitado”, expresó, el hombre que junto a su familia se embolsó más de 5,000 millones de dólares de la cooperación venezolana, sin rendir cuentas a nadie.
“Ahora no hay pretexto para decir que todo es más caro. Nadie puede decir que todo es más caro porque subió el precio de la gasolina, porque no está subiendo. Hay quienes están apostando que no podamos sostener”, añadió