La sancionada policía sandinista publicó su comunicado habitual luego que capturan a los opositores y allanan las viviendas de estos sin una orden judicial. Los delitos que le imputan a las tres disidentes sandinistas son el de promover e incitar a sanciones internacionales en contra de la dictadura de Daniel Ortega y hacer actos de terrorismo.
La mañana de este domingo las viviendas de Ana Margarita Vijil, Suyen Barahona, presidente de Unamos y Dora María Téllez, miembros de Unamos, antes conocido como Movimiento Renovador Sandinista (MRS), amanecieron rodeadas de policías, que terminaron allanando y capturando a las tres opositoras.
La noche del sábado, 12 de junio, la también parte de Unamos, Tamara Dávila, fue secuestrada por civiles armados y luego se conoció que la sancionada policía sandinista le había trasladado bajo investigación por los delitos antes mencionados.
“El día de hoy domingo, 13 de junio de 2021, fueron detenidas las ciudadanas Dora María Téllez Arguello y Ana Margarita Vigil Guardián, ambas son investigadas por realizar actos que menoscaban la independencia, la soberanía y la autodeterminación, incitar a la injerencia extranjera en los asuntos internos, pedir intervenciones militares, organizarse con financiamiento de potencias extranjeras para ejecutar actos de terrorismo y desestabilización, proponer y gestionar bloqueos económicos, comerciales y de operaciones financieras en contra del país y sus intuiciones, demandar, exaltar y aplaudir la imposición de sanciones contra el Estado de Nicaragua y sus ciudadanos”, cita la sancionada policía sandinista, obediente a Daniel Ortega.
Este fin de semana, Dora María Téllez y Tamara Dávila, dos de las ahora reas políticas, comparecieron en el segmento “Sorbito de Café con Voz” para abordar el tema de las sanciones en contra de Camila Ortega Murillo, hija de la pareja dictatorial Daniel Ortega y Rosario Murillo. Las dos mujeres hicieron saber que las sanciones impuestas por Estados Unidos a través del Departamento del Tesoro, obedecen a la arremetida del sandinismo en contra de la oposición a menos de cinco meses de la realización de elecciones generales de noviembre próximo, donde Ortega ha encarcelado a cuatro de los once precandidatos que buscaban la unidad para derrotarle.
Antes de hacerse efectivo el secuestro de Ana Margarita Vigil, quien denunció el asalto de civiles armados en contra de su sobrina Tamara Dávila la noche del sábado, dijo que “Mi casa tiene policías afuera, posiblemente sea una inminente allanamiento, este video saldría en caso que me detengan ilegalmente. Seguimos en la lucha, esto es parte del proceso para salir de Daniel Ortega, aquí nadie se raja, Daniel Ortega se va, lo vamos a sacar, fuerza”.
La comunidad internacional ha reaccionado ante el secuestro de esta opositoras, la expresidente de Costa Rica, Laura Chinchilla, dijo a través de su cuenta en Twitter: “En las ultimas horas el régimen #OrtegaMurillo la ha emprendido contra las mujeres @VioletaG @TamaraDvila3 desaparecidas, DoraMTellez y @anavijil incomunicadas y con cerco policial, dirigentes, activistas, feministas, rebeldes, valientes ¡Da la cara Daniel, no seas pendejo!”, refuto la exmandataria.
Ericka Guevara, Directora para las Américas de Amnistía Internacional dijo “Las activistas políticas Dora y Ana Margarita se encuentran incomunicadas bajo cerco policial en su vivienda, hacemos un llamado a la comunidad internacional para doblegar esfuerzos ante esta grave crisis de #DDHH en #Nicaragua”, resaltó.
Simultaneamente, a la hora del allanamiento sin orden de ingreso al domicilio de Ana Margarita Vijil, Suyen Barahona y Dora María Téllez, la sancionada policía sandinista ingresó al domicilio del General en retiro del Ejército sandinista Hugo Tórrez, quien en 1975 liderara un rescate con Dora Maria Téllez para sacar de la presión a los presos políticos sandinistas y exguerrilleros, incluyendo a Daniel Ortega, actual dictador.
Los argumentos por los que lo detienen son los mismos
“Cometer actos que menoscaban la independencia, la soberanía, y la autodeterminación, incitar a la injerencia extranjera en los asuntos internos, pedir intervenciones militares, organizarse con financiamiento de potencias extranjeras para ejecutar actos de terrorismo y desestabilización» y «proponer y gestionar bloqueos económicos, comerciales y de operaciones financieras en contra del país y sus instituciones, demandar, exaltar y aplaudir la imposición de sanciones contra el Estado de Nicaragua y sus ciudadanos, y lesionar los intereses supremos de la nación”.
Minutos antes de su secuestro, Torres publicó un video en el que denunció estar rodeado de paramilitares y policías sandinistas.
“Estos son zarpazos desesperados de un régimen que se siente moribundo, no tiene asidero legal, justificación alguna para permanecer en el poder más allá de noviembre de este año, no es un reglen legal, nuestra lucha si lo es, tengo 73 años de edad, nunca pensé que a esta edad iba a estar luchando de una forma cívica y pacifica contra otra dictadura… la lucha es pacifica y eso nos da fortaleza, hace 46 años arriesgue la vida para sacar a otros presos y a Daniel Ortega, para liberar a otros 60 presos políticos, pero así es la vida y las vueltas de la vida, animo pueblo, hay que mantener el animo en alto, la historia está de nuestro lado, de que se van, se van, el fin de la dictadora está próxima”, expresó Torres antes de ser secuestrado.