Como si se tratara de una gran obra de orgullo para los nicaragüenses, el régimen de Ortega por medio del Ministerio de Salud sandinista, inauguró hoy la casa materna “Zoila Aurora Galeano”, en las oficinas del confiscado y clausurado Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh).
El Ministerio de Salud (Minsa), controlado por Daniel Ortega y Rosario Murillo, descaradamente hizo alarde de su arbitrariedad en inaugurar una vez más en una propiedad privada, una obra supuestamente para la atención de la ciudadanía. Con esta, ya sería la cuarta de nueve propiedades confiscadas y robadas por la dictadura en la que el Minsa inaugura una clínica.
Se trata de la apertura de una nueva casa materna, pero ahora edificada en la propiedad privada que pertenece al Centro Nicaragüense de Derechos Humanos en Managua, muy cerca de la casa de la pareja dictatorial.
La doctora Vilma Núñez de Escorcia, presidenta ejecutiva del Cenidh, denunció ayer ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas que: “A las 9 organizaciones que se les canceló su personería jurídica y sus bienes, hoy sus instalaciones son destrozadas y ocupadas por el Ministerio de Salud, continuando la destrucción y saqueo de sus bienes como el Cenidh en juigalpa y su sede central en Managua y las empresas periodísticas Confidencial y 100% Noticias”. dictadura-concluye-robo-de-edificio-de-confidencial
Estas instalaciones fueron allanadas e ilegalmente ocupadas por la sancionada policía sandinista en diciembre de 2018, en el contexto de las protestas ciudadanas en las que se exigían libertad, justicia y democracia en contra de Ortega y Murillo.
Y a pesar de haber recurrido por inconstitucionalidad en contra del allanamiento ilegal, la Corte Suprema de Justicia, también contralada por el sandinismo, no ha dado una respuesta.
El Cenidh fue fundado el 16 de mayo de 1990 y desde entonces se ha dado a la tarea de acompañar a las victimas de persecución, agresión, hostigamiento y hasta de violación, a como sucedió en 1998 cuando se recibió la denuncia de Zoilamérica Narváez, hija de Rosario Murillo por los abusos sexuales que cometía en su contra su padrastro, el ahora dictador Daniel Ortega.
El Cenidh, al enterarse de la noticia de la inauguración de una casa materna en sus instalaciones, invitó a unirse a un twitazo nacional para manifestarse en las redes sociales en contra del régimen de Ortega.
“Advertimos al régimen que no nos callarán, podrán robarse y destruir nuestro edificio, pero el Cenidh vive y seguirá luchando por la promoción y defensa de los derechos humanos de los nicaragüenses”, expresó este organismo de defensa.
El defensor de derechos humanos, Gonzalo Carrión, dijo que ni con la mejor obra se podrá borrar que Ortega y Murillo, robaron las instalaciones del centro donde él trabajo por 14 años.
“Tratando de disfrazar el robo y confiscación están fundando un centro de salud, ni la mejor obra que puedan hacer, les va a borrar lo que son, además de asesinos, criminales de lesa humanidad, son ladrones y no podrán disfrazar y asaltar la memoria de tantos nicaragüenses que decidieron vivir en libertad y que optaron por la democracia y nunca más impunidad y olvido”, dijo Carrión en solidaridad con el Cenidh.