25 Sep – El ex embajador Bosco Matamoros, consideró que las advertencias que ha hecho el presidente de Estados Unidos Donald Trump, sobre acciones en contra del régimen de Daniel Ortega, deben tomarse con suma seriedad.
“Estos comentarios revisten un carácter excepcional, puesto que es muy inusual que el presidente de los Estados Unidos se refiera de una forma tan continua a un país cuyo peso es marginal”, dijo Matamoros en Café con Voz.
Consideró que el nombre de Nicaragua ha venido sonando más seguido en diferentes voces de la administración estadounidense, debido a la preocupación geo-estratégica que significan las relaciones de Ortega con regímenes que son peligrosos para su seguridad nacional.
De igual forma mencionó que otro elemento es el hecho que en el Sistema Interamericano, existe una carta democrática que rige a las naciones bajo parámetros que han sido violentados por Ortega.
¿Qué esperar entonces?
El ex embajador Bosco Matamoros descartó “factores sorpresas” en el mes de octubre de parte de Trump como han afirmado algunos analistas y menos de tipo militar, porque no existen las condiciones para ello y sería una decisión altamente cuestionada que podría revertirse.
Matamoros más bien apuntó a sanciones contra dos factores fuertes de poder del régimen de Ortega, como son el Ejército como institución y el Poder Judicial.
“Si se apunta a esos dos ejes, se pondría en un predicamento sumamente difícil las relaciones de Daniel Ortega con esas instituciones, que son sus garantes, uno por las armas y otro por la instrumentalización de la justicia”, explicó Matamoros quien afirmó que Washington apunta a esa dirección.
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En el caso del Ejército, recordó la vulnerabilidad financiera a cualquier accionar en contra de sus cuentas y negocios propios; y a la falta de capacidad de respuesta en sus niveles de gasto, si el Estado sufre una seria contracción económica.
Mencionó que una señal inequívoca de que algo se teme en contra de las Fuerzas Armadas nicaragüenses, fue la venta de sus acciones en el Banco de Finanzas, al grupo ASSA.
“Les salía más barato comprar esas acciones que tenía el Ejército, que tener un socio incómodo, fue una operación de inteligencia económica y de prudencia política”, indicó el analista.
Ortega endurece para posicionarse mejor
Al hablar de las leyes de “cadena perpetua” y de regulación de “agentes externos”, que ha ordenado Ortega y que parecen endurecer su posición en lugar de mostrar debilidad, Matamoros estimó que el dictador solo busca una mejor posición ante una eventual negociación política.
Sostuvo que los pasos de Ortega en esa dirección, sólo reforzarán la confrontación con organismos de derechos humanos y organismos internacionales que piden al régimen que respete los parámetros de gobernanza.
Sobre un posible desconocimiento del régimen en la asamblea general de la OEA, el ex diplomático, estimó que este momento no existen los factores que favorezcan esa corriente. “Va a decidirse más presión para que haya elecciones aceptables, pero ilegitimidad no lo veo”, dijo.
Bosco Matamoros indicó que la dictadura no tiene futuro en el tiempo, porque no existe capacidad de respuesta desde el punto de vista financiero.
“Aquí somos una pequeña economía con visión de gran potencia sin tener los recursos y para darnos una idea, solo el PIB de Miami es cuatro veces más que el de Nicaragua, es decir, no hemos relativizado que este régimen que está llegando a un punto sin salida que de mantenerse, nos puede llevar a un retroceso de 40 y hasta 50 años”, concluyó.