La criminal dictadura familiar sandinista que encabezan Daniel Ortega y Rosario Murillo, emitió un temeroso y escuálido «comunicado», refiriéndose a la caída de su par, la tiranía familiar de Bashar al-Assad em Siria, en el cual ni siquiera se atreven a mencionar al criminal que ha pedido asilo político en Rusia.
Tras semanas de protestas y enfrentamientos, el régimen sirio fue derrocado, el dictador Bashar Al-Assad huyó por aire y el país apenas despierta, reconociéndose como un pueblo en libertad, con todos los retos que plantea una revolución.
«Analizan situación» y el cuento del «injerencismo»
«Analizamos la situación en la hermana república de Siria, y, como siempre nos convocamos, y convocamos, al respeto y la no injerencia», dice en el primero de los dos párrafos escrito por Rosario Murillo.
Asimismo Murillo escribió que confían en que «la sabiduría de los pueblos, que, como en Siria viven su cultura milenaria, y por lo tanto, estamos seguros que sabrán encontrar caminos propios, tomando sus propias decisiones, en la madurez y saberes que les caracterizan».
Asimismo la criminal que es segunda al mando de la dictadura familiar, dijo que se unen «al clamor de todos los que en el mundo defendemos soberanía, derechos, estabilidad y paz, para bien de los pueblos y resguardo de los valores e intereses fundamentales de la humanidad».
Los rebeldes sirios declararon el domingo el derrocamiento del presidente Bashar al-Assad tras hacerse con el control de Damasco, obligándole a huir y poniendo fin a décadas de gobierno de su familia tras más de 13 años de guerra civil, en un hito para Oriente Medio.
Los rebeldes islamistas también asestaron un duro golpe a la influencia de Rusia e Irán en el corazón de la región, aliados clave que apuntalaron a Assad durante periodos críticos del conflicto. Cayó dictadura familiar de Bashar al-Assad en Siria