Las tensiones entre Panamá y Nicaragua se incrementan a medida que la dictadura sandinista eleva el tono para proteger al exmandatario Ricardo Martinelli, quien se encuentra refugiado en la embajada nicaragüense en ese país.
Ante la negativa de la dictadura de entregar a las autoridades panameñas a Martinelli, señalado de corrupción y malversación de fondos, surgen diversos escenarios. Uno de estos, podría ser la suspensión o ruptura de relaciones diplomáticas.
“Es posible la ruptura de relaciones diplomáticas. Nicaragua tendría que sacar todo el material de la sede diplomática, que pierde su condición. Al perderla, las autoridades panameñas si podrían ingresar y detener a Martinelli”, dijo el catedrático y especialista en Relaciones Internacionales, Carlos Murillo en entrevista a Café con Voz.
No obstante, aseguró que la ruptura de relaciones diplomáticas podría no convenirle a Panamá por el tránsito comercial terrestre a través de Nicaragua.
“El régimen está muy confiado, porque si deciden cerrar fronteras, paralizan el comercio centroamericano. Por eso, al final, los gobiernos terminan cediendo porque todo el comercio por vía terrestre de Panamá y Costa Rica pasa por Nicaragua”, aseguró Murillo.
Nicaragua viola acuerdos internacionales
El exmandatario se encuentra en la embajada de Nicaragua en Panamá desde el pasado 7 de febrero de 2024, luego de haber sido ratificada la sentencia en su contra por blanqueo de capitales en la compra de medios de comunicación, inhabilitando su candidatura presidencial.
El 4 de marzo, la dictadura anunció que trasladaría su oficina consular a una instalación contigua a la sede diplomática de Nicaragua en Panamá, decisión que no tuvo el beneplácito de las autoridades panameños.
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“Panamá no puede permitir la operación en una casa aledaña o en otro barrio sin una autorización previa, una solicitud, un trámite y una revisión del proceso. Nicaragua ya violó la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas y consulares. Este es un conflicto creado por Martinelli con la dictadura Ortega Murillo”, dijo Murillo.
El especialista añadió que Panamá podría tomar medidas contra la oficina consular de Nicaragua que se instaló sin autorización de las autoridades panameñas.
Nicaragua no puede hacer nada si Panamá decide cortar los servicios públicos a la casa donde se trasladó la oficina consular. Es una casa, no una oficina diplomática.