El Departamento de Estado de Estados Unidos se pronunció por los 500 días de secuestro del Obispo de la Diócesis de Matagalpa, Monseñor Rolando Álvarez, condenado a 23 años de prisión por la dictadura sandinista y señala que las imágenes que mostró el régimen son parte de un montaje.
“Durante ese tiempo, las autoridades nicaragüenses mantienen aislado al obispo Álvarez, bloquearon la evaluación independiente de las condiciones de su encarcelamiento y publicaron videos y fotografías montados que solo aumentan las preocupaciones sobre su bienestar”, señala el Departamento de Estado.
La instancia añade que además de Álvarez, muchos líderes religiosos siguen detenidos injustamente en Nicaragua, incluido el obispo Isidoro Mora y varios sacerdotes.
“El régimen Ortega-Murillo continúa imponiendo severas restricciones a las comunidades religiosas y negando a los ciudadanos nicaragüenses la capacidad de practicar libremente sus religiones y expresar sus creencias”, añade el comunicado.
A la vez, hicieron un llamado a la dictadura para que libere a Álvarez.
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“Una vez más hacemos un llamado al gobierno de Nicaragua para que libere de inmediato y sin condiciones al obispo Rolando Álvarez”, señala.
La dictadura inició una ola de secuestros el 20 de diciembre, con la captura de Monseñor Isidoro Mora, Obispo de la Diócesis de Siuna. De esta manera, el régimen mantiene a dos obispos presos, incluyendo al de Matagalpa, Monseñor Rolando Álvarez; 13 sacerdotes y dos seminaristas.
La dictadura también retuvo por algunas horas a los sacerdotes Jader Guido y Oscar Escoto, ambos vicarios de la Diócesis de Matagalpa.