El Instituto Nicaragüenses de Seguridad Social INSS publicò finalmente el anuario estadístico 2021, con un año de atraso, en el que se revelan que las finanzas de la institución no van del todo bien.
Según el Anuario Estadístico las reservas técnicas de la institución se agotaron y en su lugar, tiene un pasivo de 2697 millones de córdobas, de los que 2,563 millones corresponden a Invalidez Vejez y Muerte.
¿Qué significa esto para los trabajadores?
“Prácticamente ya no hay dinero para darles a los jubilados su pensión que les corresponde por derecho, porque no solamente hay jubilados, también hay discapacitados temporales y si no hay reservas no se van a poder solventar esos gastos. Todo el patrimonio y dinero de los trabajadores se ha derrochado”, dijo José Antonio López, procurador laboral, en entrevista a Café con Voz.
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El estallido de la crisis en 2018 provocó la pérdida de unos 250 mil cotizantes que el INSS aún no recupera totalmente.
Sumado a las fallidas reformas a la Seguridad Social en 2014, 2018 y 2019, el INSS cuenta con una gran carga de trabajadores. El Anuario Estadístico 2021, indica que el INSS tenía en ese año 3,960 trabajadores, 642 en áreas de dirección y 1,944 profesionales y técnicos.
Según una planilla del INSS de 2019 en poder de Café con Voz, el salario más elevado es el de Roberto López, presidente del INSS, con 111,133.40. Entre los diez más altos salarios de la institución se destaca el del sacerdote Eddy Montenegro, quien en 2019 devengaba 89,378 córdobas de las arcas del INSS.
Por su parte, López expresa que la falta de pago o retorno de inversiones que ha hecho el INSS son otro de los factores que inciden en la bancarrota de la institución.