La evaluación hacia la labor del dictador Daniel Ortega refleja un saldo negativo, cuando un 55% indica que es mal o muy mal y un 35% bien o muy bien, según la reciente encuesta de Opinión Pública realizada por la firma Cid Gallup.
Para esta encuesta, Cid Gallup realizó 1,204 entrevistas distribuidas por todo el territorio de Nicaragua.
El posicionamiento del dictador sandinista, Daniel Ortega entre sus conciudadanos es homogéneo y es en Managua, donde se encuentra alguna diferencia es entre los estratos según situación económica.
“Quienes están pasando por dificultades financieras, tienden a ser más críticos que aquéllos con más capacidades financieras”, detalla la encuesta.
Cid Gallup registra que se acorta la brecha entre quienes indican que el rumbo del país va por un camino equivocado y quienes consideran lo contrario, que aún se mantienen en minoría.
“Este grupo insatisfecho, está disperso por todo el territorio nacional, en la cohorte de 25 a 39 años, quienes viven en una situación económica peor ahora que el año previo y entre quienes no tienen preferencia partidaria o no siguen al Frente Sandinista de Liberación Nacional FSLN”, señala Cid Gallup.
Ortega el peor evaluado en Nicaragua
Según Cid Gallup, el dictador registró su mejor calificación en 2007, año en el que llegó al poder.
“En esta oportunidad, Ortega tiene un saldo negativo y es el peor evaluado después de un periodo similar de esta presidencia”, señala la firma encuestadora.
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Cid Gallup detalla que es posible que las medidas que ha tomado contra algunos líderes políticos y estudiantiles “le están afectando en la proyección ante la población, así como los problemas económicos por los que atraviesan las familias”.
Ortega no es capaz de solucionar las crisis
Además, otro factor que incide en la reducción de la aceptación de Ortega es el alto costo de vida y el desempleo.
Ante la posibilidad de acción de Ortega, dos terceras partes de la población adulta no confía en que él pueda resolver esas situaciones que están afectando la calidad de vida de sus conciudadanos. Esta falta de confianza, un grupo de seguidores del FSLN tampoco esperan acciones en su beneficio de parte de su máximo líder.
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“Ortega recibe la confianza de alrededor de dos de cada cinco nicaragüenses adultos. En este grupo se destaca como los seguidores del FSLN en casi su totalidad opinan que «siempre o casi siempre su presidente está actuando en busca de su bienestar”, “sí está haciendo bien cosas», «da merienda escolar», «a los niños de todas las escuelas públicas les da útiles escolares», «a las mujeres les da el crédito de usura cero», expone su firma encuestadora.
Por el contrario, poco más de la mitad – 56%-, manifiesta que «nunca o casi nunca hace lo mejor para el pueblo”. Quienes opinan de esa forma, son en especial, mujeres y personas de bajos recursos.
Murillo también cae en popularidad
Daniel Ortega y Rosario Murillo, están en posiciones similares en la aceptación del pueblo, no obstante, son quienes reciben más opiniones desfavorables.
Laureano Ortega es el hijo de la pareja dictatorial, quien algunos informantes agregaron “que era el escogido para sustituir a Ortega en su retiro”.