VOZ DE AMÉRICA. Alberto Jiménez se enteró que era portador del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) cuando recién acababa de cumplir 16 años de edad y dice que fue por pura casualidad.
Por curiosidad fue a chequearse a un centro de salud, pero notó algo extraño cuando le tomaron sus primeras muestras de sangre. Al día siguiente, cuando fue por los resultados le dijeron que necesitaban hacerle otra prueba que finalmente le confirmó lo que los médicos temían: era VIH positivo, pero la forma en que se lo comunicaron dice que lo marcó durante toda su vida.
“Después de un nuevo análisis me enviaron al fondo donde estaba la persona que me había atendido la primera vez y me da a llenar una solicitud, y esta persona me dijo: ‘pues fíjate que tú tienes SIDA’. Para ese entonces yo dije que los doctores decían que era SIDA. Por ende, para mí fue bien difícil. Lo primero que yo dije: ‘ya me morí’”, lamenta.
Jiménez entró en un proceso de depresión y al poco tiempo que le diagnosticaron el virus y comenzó a tomar sus medicamentos, decidió suspenderlos producto de los sentimientos de culpa que sentía en ese momento.
“Comencé a torturarme mentalmente, psicológicamente. Yo tenía 16 años de edad. Fue un proceso bien difícil porque tenía que lidiar con ese diagnóstico. Intenté suicidarme, intenté lastimarme de muchas formas. Hice muchas cosas en contra de mí hasta que un día dije, ‘voy a dejar de tomar mi medicamento’, y lo hice, y eso me llevó a estado agravado”, recuerda.
De acuerdo con este joven de 29 años, ser portador de VIH en Nicaragua conllevaba mucho estigma, sobre todo cuando él recibió el diagnóstico. No hizo público su diagnóstico hasta que cumplió 22 años años tras recibir apoyo en una iglesia.
Actualmente considera que los prejuicios sobre la enfermedad persisten y dice que por esa razón hay muchas personas en Nicaragua que no hacen público su diagnóstico. “Son contados con los dedos de la mano las personas que han logrado expresar y hacer público su diagnóstico, yo soy una de esas personas”.
A través de la plataforma de TikTok recientemente contó sobre la enfermedad de manera pública y muchas personas le escribieron en privado manifestándole que tenían la misma condición y que lo felicitaban por haberlo expresado.
El primer video que subió tiene casi 1,5 millones de reproducciones en su cuenta de TikTok donde tiene más de 200.000 seguidores.
La plataforma, según dice, la utiliza para crear conciencia sobre el virus y para dar esperanza a las personas que se les diagnostica a que no todo está perdido.
“ Yo, por descuido, dado a la depresión que viví, dejé de tomar mi tratamiento y caí en etapa terminal, pero afortunadamente logré recuperarme”, comenta el joven. “Entonces yo compartía todo eso en la forma de TikTok”.
“Eso originó que personas comenzaran a seguirme dentro del país y fuera del país», pero lo que más le llamó la atención es que dice que «dentro del país comenzó a ver que esas personas que, literalmente de manera oculta, (viven) sus historias de discriminación».
Pero también le trajo consecuencias negativas, por lo que tuvo que salir del país el 1 de noviembre junto a su pareja, según dice, por el estigma y la discriminación que sufrió en Nicaragua por años.
Más de 500 casos nuevos de VIH en Nicaragua
Nicaragua acumula desde 1987, hasta septiembre de 2021, 9.691 casos de VIH, según datos oficiales.
De enero a junio de este año se registraron 527 nuevos contagios de VIH.
También reciben tratamiento antirretroviral unas 6.697 personas.
Los especialistas lamentan que en Nicaragua, aparte de la poca educación que hay acerca del tema, de cierta manera, se ha tratado de educar al personal médico en las escuelas y en muchas empresas, lamentablemente la información no ha sido avanzada.
“Todavía hay muchos mitos, ideas erróneas sobre las personas que viven con VIH. Eso lleva a que la gente, por miedo, te discrimine. Piensan que se va a transmitir de otra manera, o se va a transmitir de la otra forma”, dijo un especialista que prefirió no ser citado por temor a represalias.
Se puede vivir con VIH si es tratado a tiempo
De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EEUU (CDC por sus siglas en inglés) el VIH es un virus que ataca el sistema inmunitario del cuerpo y si no se trata puede causar SIDA (síndrome de inmunodeficiencia adquirida).
Los CDC explican que con atención médica adecuada, el virus se puede controlar y las personas con infección por el VIH que reciben el tratamiento eficaz pueden tener una vida larga y saludable, y proteger a sus parejas.
De igual forma recomiendan hacerse una prueba rutinaria para descartar cualquier tipo de sospecha.
“Cuando las personas que tienen el VIH no reciben tratamiento, la infección generalmente pasa por tres fases de progresión. Pero el tratamiento para el VIH puede hacer más lenta o prevenir la progresión de la enfermedad. Con los avances en el tratamiento para el VIH, la progresión a la fase 3 (SIDA) es menos común hoy que en los primeros años en que surgió la enfermedad”, explican los CDC.
El 1 de diciembre de cada año, el mundo conmemora el Día Mundial del Sida. El sitio web de las Naciones Unidas dice en un mensaje publicado el jueves que: El mundo se une para apoyar a las personas que conviven con el VIH y para recordar a las que han fallecido por enfermedades relacionadas con el sida.
Las desigualdades que perpetúan la pandemia de sida no son inevitables; por supuesto que podemos abordarlas indica la ONU. En este Día Mundial del Sida, hoy 1 de diciembre, ONUSIDA insta a todos a abordar las desigualdades que están frenando el progreso para poner fin a la enfermedad.