Debido a la negativa de la dictadura sandinista de permitirle ver a su hija de ocho años, el secuestrado político y cronista deportivo, Miguel Mendoza, inició una huelga de hambre el pasado 19 de septiembre, según dieron a conocer sus familiares en una conferencia de prensa este miércoles.
Los familiares señalaron que el pasado 27 de agosto, cuando se permitieron visitas a los presos políticos, le revelaron a Mendoza la situación anímica de su hija Alejandra, de ocho años de edad.
“Pese a ser un hombre fuerte y de estado emocional increíble, los que le conocemos, sabemos leer en el brillo de sus ojos, la angustia que le ha provocado saber de lo mal que la está pasando su hija”, expusieron
Sin embargo, los familiares se mostraron preocupados, debido a que la huelga de hambre significará un mayor deterioro en la salud de Mendoza, quien ha perdido 40 libras en la Dirección de Auxilio Judicial, mejor conocida como “El Nuevo Chipote”.
“Y aunque Miguel es consciente de los riesgos, considera que es la única salida que le han dejado en sus intentos por volver a abrazas a su hija, después de estos 457 días que equivalen a más de diez mil novecientos horas sin abrazar a su pequeña”, señalan los familiares.
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Expresaron que su abogado ha introducido once solicitudes para que Miguel pueda ver a su niña, lo que para ambos es un derecho, y no se ha obtenido respuesta.
“Demandamos la Liberación de Miguel, a quien no se la logrado demostrar ni un solo delito, por lo que se encuentra encarcelado como producto de una acción incongruente con los principios y artículos consignados en los preceptos constitucionales de Nicaragua”, añadieron.
Además, compartieron uno de los mensajes de Alejandra, hija de Mendoza, quien expresa tristeza y sufrimiento por tener más de un año de no verse.
“Hola papi, he grabado videos, he realizado dibujos con la esperanza de que alguien te los pueda mostrar. Mi corazón sufre mucho, porque tengo más de un año de no verte. Te amo.” Esto lo ha expresado Alejandra en sus escritos y oraciones.