La organización de diáspora Conexión Nica-USA, mostró su preocupación por el triunfo de Gustavo Petro en Colombia y el restablecimiento de canales diplomáticos con la dictadura sandinista.
“La historia latinoamericana y en carne propia la nicaragüense, nos ha enseñado que cuando la izquierda clásica y populista está en la procura del poder, anuncia todo tipo de promesas falsas y aseveraciones públicas con el fin de persuadir al electorado a su favor”, expresa Conexión Nica-Usa.
La organización señaló que por esta razón “ve con cautela y desconfianza” las aseveraciones del señor Gustavo Petro con relación a la crisis política de Nicaragua.
Por otro lado, la organización se refirió a la situación actual de Nicaragua, que sufre la escalada de la represión de la dictadura sandinista.
“Las condiciones de nuestro pueblo maltratado y sometido por la dictadura Ortega – Murillo son muy difíciles, injustas e inhumanas. Cada día el pueblo tiene sed de paz, justicia y libertad”, señaló Conexión Nica-Usa en un comunicado.
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A la vez, la organización llamó a los opositores de Nicaragua a ser sinceros y firmes en sus valores democráticos.
“CNUSA está consciente de eso y se une al justo clamor. El pueblo nicaragüense espera que sus líderes de oposición sean diáfanos, sinceros y firmes en sus valores democráticos en cada espacio que alzan su voz, lo cual conlleva a avivar la esperanza en un futuro mejor, lleno de paz, libertad y progreso”, expresa.
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El domingo 20 de junio fue un día histórico en Colombia: por primera vez el electorado eligió a un exguerrillero de izquierda como presidente, Gustavo Petro, y a una afrodescendiente y activista ambiental, Francia Márquez Mina, como vicepresidenta del país.
La pareja, que obtuvo más del 50% de los votos, derrotó al millonario de derecha de la industria inmobiliaria Rodolfo Hernández.