La política de Estados Unidos y el resto de la comunidad internacional en Latinoamérica junto con los débiles mecanismos diplomáticos, ha permitido que sistemas autoritarios como el de Nicaragua, Cuba, Bolivia y Venezuela, “florezcan” y se sigan expandiendo, a criterio del profesor Eduardo Gamarra, investigador de la Universidad Internacional de la Florida.
“Los mecanismos han sido ineficientes. Las sanciones impuestas a Cuba y Nicaragua,no tienen nada que ver con las sanciones a Rusia. Si se aplicaran las mismas sanciones (como a Rusia), el panorama sería diferente”, aseveró Gamarra en una entrevista con Café con Voz.
A criterio del catedrático, estos mecanismos, por su debilidad han permitido que el régimen de Daniel Ortega, continúe cometiendo delitos.
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“Espero que se haga algo más duro respecto a Ortega con respecto a las sanciones, más allá de las sanciones individuales, que sí tienen un impacto sobre individuos, pero no han dado resultados porque hay muchas maneras de saltarse esas sanciones”, dijo Gamarra.
América Latina cambiante por regímenes autoritarios
La situación en América Latina, influenciada por la invasión de Rusia a Ucrania y por el hastío de los políticos tradicionales, es considerada como preocupante por Gamarra, porque sirven de plataforma para fortalecer los regímenes autoritarios.
“Es parte de una tendencia regional donde los gobiernos de turno, están perdiendo elecciones principalmente porque no han lidiado bien con la pandemia, no les ha ido bien en términos económicos y existe una especial desconfianza en el sistema político tradicional”, dijo Gamarra.
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Países socialistas a la expectativa de la invasión de Rusia a Ucrania
Gamarra aseguró que los países socialistas, como Cuba, Nicaragua y Venezuela, están expectantes al avance de la guerra provocada por Rusia en Ucrania.
“En este hemisferio hay una colección de gobiernos que en este momento en el contexto de la invasión de Rusia y Ucrania, están sin ubicación en términos geopolíticos. Esto porque Rusia pierde si gana y pierde si pierde, y esto representa mucho para los gobiernos socialistas de la región”, dijo.
Al respecto, expuso que estos países tienen sus esperanzas en China, pero que debido a su rol en el conflicto, se deja entrever que este país no está interesado en apoyar a regímenes socialistas.
“China está jugando un rol inteligente y con semejante inversión no va a sacrificarla por Ortega, Maduro o por Boric. Estamos en un momento de transición, nuevo e interesante. No hemos estado acá. El papel que vaya a jugar la administración Biden va a ser determinante”, expresó.