El periodista y humorista costarricense, Juan Diego Ramírez, fue expulsado de Nicaragua en la frontera de Peñas Blancas por un oficial este lunes, según informó el periodista en sus redes sociales.
Ramírez se dirigía a Nicaragua a vacacionar con un grupo de amigos a través de la línea de autobuses Tica Bus.
A las 11:30 a.m. Ramírez llegó a la aduana nicaragüense. Al llegar a la frontera un policía nicaragüense pasó lista en el bus donde mencionaba a cada uno de los pasajeros.
Al momento en que se refirió a Ramírez, lo volvió a ver a los ojos y le indicó que debía acompañarlo.
Según compartió Ramírez, fue dirigido a un lugar donde se le realizaron preguntas de carácter “tendencioso” expresó el colega. Durante el conversatorio se relacionó el hecho de que sea periodista y humorista. Sin embargo, destacó que “no cayó en las provocaciones”.
Después de 30 minutos de interrogatorio, los oficiales de la dictadura le notificaron que no es apto para ingresar a Nicaragua, sin darle mayores detalles.
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Robo descarado
Según indicó Ramírez los oficiales se encargaron de que pagara todos los impuestos como si hubiese ingresado al país para lo que debe cancelarse $13. Ramírez pagó con $20 a lo cual debían darle el vuelto sin embargo le dijeron que no le darían el vuelto tampoco.
Además de este incidente, el colega habría sido tomado por la fuerza y le sujetaron el hombro “como si fuera un “delincuente” y lanzado al suelo en la frontera costarricense, aseguró.
Entre las conclusiones del colega mencionó que en definitiva Nicaragua no es un destino seguro para periodistas.
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“No es admisible que haya vivido lo que hoy sufrí. Tuve que alertar a mis amigos que estaba detenido en Nicaragua. Lo que viví fue catastrófico y terrorista”, señaló.
“Tengan mucho cuidado. Voy a tratar que este video llegue a todos los organismos de derechos humanos. Hoy lo viví en carne propia”, añadió.
Es más importante la bandera del FSLN
Ramírez destacó al final de su video que la aduana nicaragüense impera la bandera del Frente Sandinista.
“Ellos dejan claro que son más sandinistas que nicas. Es algo que pone en riesgo la democracia de un país. Por supuesto que Nicaragua no tiene democracia, es una dictadura, pero hoy lo viví en carne propia”, señaló.
“Mucho cuidado con visitar a Nicaragua”, concluyó.