La dictadura teocrática de Irán, ejecutó este lunes al segundo prisionero relacionado con las protestas en todo el país que comenzaron en septiembre.
La agencia de noticias Mizan, administrada por el Poder Judicial, informó que Majidreza Rahnavard, fue ahorcado públicamente en la ciudad de Mashhad.
Rahnavard había sido acusado de matar a puñaladas a dos miembros de las fuerzas de seguridad el mes pasado en Mashhad.
Los activistas dicen que Irán, ha sentenciado a muerte a por lo menos una docena de personas en juicios a puerta cerrada.
La primera persona sentenciada a muerte en relación con las protestas, fue ejecutada la semana pasada.
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El encargado de política exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, dijo este lunes que se espera que los ministros de relaciones exteriores del bloque aprueben “un paquete de sanciones muy fuerte” contra Irán por la represión a las protestas y por suministrar drones que Rusia ha usado en Ucrania.
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La ministra de exteriores alemana, Annalena Baerbock, declaró a los reporteros antes de la reunión en Bruselas que las ejecuciones en Irán eran “un intento flagrante de intimidación”.
«Estamos dejando en claro que estamos con la gente inocente en Irán. Un sistema que trata a su pueblo de esa forma no puede esperar que pueda tener unas relaciones medianamente normales con la Unión Europea”, dijo Baerbock.
Las protestas comenzaron en respuesta a la muerte bajo custodia policial de la joven de 22 años Mahsa Amini, quien había sido detenida por la policía de la moral de Irán, por violar el código de vestimenta para las mujeres.